El ministro de Economía, Axel Kicillof, presentó la Ley de Presupuesto. En la exposición, el Ministro estuvo acompañado por el secretario de Política Económica, Emanuel Álvarez Agis; el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, y el de Finanzas, Pablo López.

El proyecto estima un crecimiento del PBI del 3 % y una inflación del 14,5 %. Además pronostica un dólar oficial a $ 10,5.

El Ministro aseguró que el presupuesto no busca condicionar al gobierno. Según sus propias palabras, "El Poder Ejecutivo entrante tendrá atribuciones para hacer modificaciones y reasignaciones de partida, en caso de tener otra idea de gobierno. Incluso puede modificar la Ley de Presupuesto, en caso de tener otra composición de las cámaras (del Congreso) con otra mayoría”, explicó. El Presupuesto también estima que el próximo año los ingresos corrientes crecerán el 21 %, los tributarios lo harán en 25,2 % y los gastos corrientes aumentarán el 16,7 %, lo que dará un resultado primario en equilibrio con un leve superávit del 0,09 %. También prevé un precio internacional para la soja de 375 dólares la tonelada.

Kicillof aseguró que gracias a las políticas anticíclicas "la economía argentina está en crecimiento este año a partir del segundo trimestre, lo muestran los indicadores públicos y los indicadores privados". En este sentido, el Ministro defendió las politicas impulsadas desde el kirchnerismo como Procrear, Asignación Universal por Hijo (AUH), Ahora 12, Fondear y Progresar, y aseguró que “el presupuesto 2016 estima una suba del 18,4 % en asistencia social”.

En respuesta a quienes pronostican un escenario de devaluación y ajuste a nivel nacional, el Ministro sostuvo que “no hay que responder con medidas tontas porque después de una mega devaluación no queda nada en pie”. En este sentido, agregó que la economía mundial no va a seguir en una caída abrupta sino que va a estabilizarse.

El proyecto será tratado desde el martes 24 por la comisión de Presupuesto de la Nación. Desde el oficialismo pretenden obtener el dictamen de la comisión ante de que finalice septiembre y llevarlo al Congreso para que sea tratado antes de las elecciones generales del 25 de octubre. Si esto sucede, el proyecto será tratado en el Senado en noviembre, antes de que finalice el período de sesiones ordinarias.