"Mi experiencia de gobierno terminó acá y mañana renunciaré", afirmó este domingo 4 de diciembre el primer ministro de Italia, Matteo Renzi, al reconocer la derrota del "Sí" a la reforma constitucional que él impulsó como un plebiscito a su gobierno. El presidente Sergio Mattarella recibirá este lunes la dimisión de Renzi y desde la oposición solicitan un "llamado inmediato a elecciones", aunque para eso debería sancionarse una nueva ley electoral.

Renzi había vinculado su carrera política a una victoria del Sí durante la campaña electoral, por lo que, cuando el 30 % de las mesas marcó una clara tendencia a favor del "No", confirmó su promesa. La ventaja en ese momento era de 15 puntos en la consulta popular en casi todas las grandes ciudades, incluida la capital, Roma, tras una jornada que alcanzó el 70 % de participación, a pesar de que la consulta no era obligatoria.

El veredicto de las urnas mostró un fuerte rechazo al referéndum constitucional que se situó en el 59,63 %,  frente al 40,37 % que votó Sí.  Las únicas regiones en las que la opinión positiva prevaleció sobre la negativa a las reformas fueron Toscana, Trentino Alto Adige y Emilia Romagna.

El saliente primer ministro asumió "toda la responsabilidad" por la derrota de su propuesta de reformar la Constitución para reducir los miembros del Senado de 315 a 100, la elección indirecta de sus miembros y la disminución de sus funciones legislativas. Los argumentos del "Sí" eran un ahorro de 500 millones de euros al año y dar agilidad y estabilidad al Gobierno, en un país que tiene un tiempo medio de sanción de leyes de 30 meses y que ha tenido 63 gobiernos desde la fundación de la República, hace 70 años.
 

La oposición

Desde el partido antisistema Cinco Estrellas hasta las fuerzas de derecha Liga Norte, Hermanos de Italia y la Fuerza Italia de Silvio Berlusconi, sostuvieron que la propuesta era "antidemocrática" y le quitaron el respaldo. Inmediatamente, tras conocerse los resultados a boca de urna, el líder de la Liga Norte, Matteo Salvini, y el diputado de Fuerza Italia Renato Brunetta reclamaron la dimisión de Renzi y el llamado a elecciones. 

"Si se confirman los primeros números, será la victoria del pueblo contra los poderes fuertes. Renzi debería renunciar en los próximos minutos y de inmediato se tiene que convocar a nuevas elecciones. Nada de gobiernos técnicos; ahora les toca a los italianos elegir", exigió Salvini, y agradeció la "participación popular" en el referéndum.

Renzi, de 41 años, había sido elegido por un acuerdo parlamentario en febrero de 2014. En caso de un llamado a nuevas elecciones debería sancionarse una nueva ley electoral, ya que la vigente, conocida como "Italicum", no prevé elecciones para el Senado porque fue concebida pensando en que la reforma sometida hoy a votación sería aprobada. El presidente Mattarella tendrá la facultad, renunciado Renzi, de designar un Gobierno de transición hasta las elecciones parlamentarias, previstas en principio para 2018.