Una adolescente de 15 años de Las Heras, que participaba de la etapa final del macabro juego conocido como Ballena Azul, fue rescatada en su domicilio por personal de la Policía Federal Argentina (PFA) que recibió un aviso de la oficina de Interpol de Colombia alertando sobre el riesgo que corría la joven, informó hoy la fuerza de seguridad.

La joven sufría ciberacoso, amenazas de que matarían a su familia y estaba cortajeada y herida, además de haber recibido la "orden" de terminar el macabro desafío, lo que supone la muerte, según informó un comunicado de la PFA.

"La adolescente vivía un verdadero calvario: al entrar en el juego comenzó a recibir ciberacoso, con graves amenazas contra la integridad física de su familia. Una cuenta de Colombia le aseguraba que, si no hacía lo que le ordenaban y lo mostraba, sus seres queridos iban a sufrir las consecuencias", detalló el documento oficial.

El objetivo de Ballena Azul, que surgió en Rusia y que se expandió al mundo, es proponer a los participantes 50 desafíos que lo van preparando psicológicamente para el último reto, que es el suicidio, y su blanco predilecto son adolescentes de entre 12 y 16 años en situación de vulnerabilidad.

La adolescente mendocina está recibiendo asistencia psicológica, ya que cuando la encontraron en su casa tenía varios cortes "presuntamente autoinfringidos", indicó la PFA.

Un antecedente de la cooperación internacional contra el macabro desafío ocurrió en septiembre último, cuando una investigación de la Policía regional vasca frustró un suicidio colectivo de personas residentes en varios países, en una operación que terminó con la detención en Argentina el 11 de agosto del presunto inductor, un joven de 17 años de Entre Ríos.

Esa investigación policial comenzó el 19 de julio cuando personas del entorno de unas de las víctimas españolas detectaron en la red Instagram conversaciones extrañas en las que se hablaba de autolesiones. 

Uno de los responsables de la policía regional vasca (Ertzaintza), Hugo Prieto, dijo al respecto que el grupo que propiciaba el desafío estaba integrado por seis jóvenes, una de ellas española, así como por un un mexicano y cuatro argentinos, e indicó que en esa red social encontraron otros tres perfiles falsos creados por el detenido argentino para dar más credibilidad.

Especialistas en investigación criminal comprobaron que había una llamada a un suicidio colectivo pactado que se iba a llevar a cabo el 31 de diciembre, y efectivos de la policía vasca junto con el Juzgado de Instrucción número 1 de San Sebastián y un fiscal especialista en Criminalidad Informática contactaron con la Fiscalía argentina, lo que permitió identificar al presunto inductor del suicidio colectivo.