Este jueves, docentes y padres marcharán en contra del cierre del Instituto Antonio Próvolo. El reclamo se suscita luego de que el martes 14, la Dirección General de Escuelas determinara, a través de la resolución 93/2017, la "suspensión temporal de las actividades" que se desarrollaban en la institución lujanina. La decisión se tomó luego de conocerse numerosas denuncias por abuso sexual a estudiantes del establecimiento por parte de curas y otros trabajadores de la institución.

La suspensión sería, en principio, hasta que la Justicia determine una sentencia firme sobre los sacerdotes imputados por lo más de 20 supuestos casos de abuso a alumnos. Sin embargo, desde la DGE deslizaron que el ciclo lectivo 2017 no comenzará en el Próvolo, por lo que padres y docentes decidieron manifestarse.

Según consignó ayer Diario UNO, Leticia Guellet, docente del Próvolo y vocera del grupo, señaló: "Tenemos una formación integral del niño hipoacúsico que no encontrará en otra institución". Algunos padres adelantaron que si no consiguen una escuela similar, demandarán al Estado provincial.
 

Los imputados, en la mira

La Justicia determinará si los cinco acusados –entre ellos, dos sacerdotes– de cometer abusos contra niños, niñas y adolescentes hipoacúsicos en el Instituto Próvolo de Luján de Cuyo permanecerán en prisión hasta que se realice el juicio y concluya el proceso en su contra. El fiscal adjunto, Fernando Guzzo, confirmó a Unidiversidad que hoy miércoles 15 será la audiencia en la cual la titular del 4.º Juzgado de Garantías, Alejandra Alonso, decidirá si acepta la solicitud de prisión preventiva contra los cinco acusados de abuso.