Campo Los Andes tiene aproximadamente 104 mil hectáreas. Este distrito limita directamente con la República de Chile al oeste, por lo que está al borde de la cordillera de Los Andes. Allí se estableció alguna vez el general San Martín antes de emprender su gesta libertadora. Además de criarse las mulas argentinas, reconocidas por su resistencia en las tareas del Ejército en alta montaña, se producen pasturas, alfalfares y frutas como peras, manzanas y duraznos. Es decir, es una zona de trabajo realmente productivo.

El establecimiento es lo que se conoció históricamente como la Estancia “El Melocotón”. Actualmente, la mayoría de la población de la localidad es militar, porque están las unidades del Ejército del Batallón de Ingenieros, el Destacamento de Caballería y el Establecimiento Campo Los Andes.

El suboficial principal encargado de Bienes Raíces y Construcciones del establecimiento, Luis Alberto Manríquez, comentó que, desde la época sanmartiniana, en ese lugar se buscó y desarrolló el animal más óptimo para realizar las expediciones a la Cordillera, y que fue –y sigue siendo tradicionalmente hasta el día de hoy– la mula argentina.

Suboficial principal encargado de Bienes Raíces y Construcciones en el Establecimiento del Ejército Campo Los Andes, Luis Alberto Manríquez. Foto: Alberto Piazza.

“El rol de la mula en el Ejército de Los Andes fue muy importante, porque fue la que trasladó a casi el 70 % de los soldados de San Martín. El resto fue todo con cargas. Y fue una mula de acá, de la provincia de Mendoza, mulares que se amansaron acá y así se pudo conformar el gran ejército para poder cruzar la cordillera de Los Andes. Porque ya se sabía de esto; esto lo analiza, lo ve y lo estudia José Antonio Álvarez Condarco, quien, cuando le pasó todo el informe a San Martín, le dijo que había un solo animal que podía transitar la montaña, y era la mula”, explicó Manríquez.

El suboficial también detalló que los caballos que usó San Martín fueron un reemplazo de las mulas, que fueron sin ningún tipo de carga durante el cruce para poder llegar con energía a los lugares de desemboques, donde el General necesitaba un animal mucho más rápido que la mula para poder realizar las cargas de caballería, es decir, los combates.

Edificación ubicada en el Haras General Las Heras que data de 1930. Foto: Alberto Piazza.

Manríquez contó que la edificación de la que fue la Estancia “El Melocotón” es quizás una de las más antiguas de Mendoza, ya que data de entre 1820 y 1830. Las paredes tienen un metro de espesor y están hechas de adobe, es decir, con amalgamas de barro. Todas las demás edificaciones de Campo Los Andes son posteriores al establecimiento del Ejército y el Haras General Las Heras data de la década de 1960.

Hubo dos períodos en los que el haras fue trasladado de Campo Los Andes: aproximadamente una década antes de la última dictadura militar de 1976, primero, hasta 1982, según explicó el mayor veterinario Martín Lazarte, y luego, en la década de 1990 hasta el año 2010. Esa fue, según el veterinario, la mejor decisión que pudo tomar el Ejército, para que se pueda criar “la mula de San Martín”.