Por primera vez en Mendoza, en el departamento de San Rafael, se halló y registró un escorpión de la familia de los Tityus bahiensis, una especie que vive solo en zonas húmedas como Misiones o en Brasil. Por eso, este descubrimiento constituye el registro más occidental hasta la fecha y aporta información para indagar sobre la distribución del ejemplar. Al mismo tiempo, abre interrogantes sobre los riesgos que podría ocasionar un animal que no es parte de la fauna del territorio mendocino.

Fue Marcos Jannello, biólogo e investigador del Conicet en el Instituto de Evolución, Ecología Histórica y Ambiente (Idevea, Conicet-UTN), el que, junto a Carlos Ariel López, herpetólogo del Instituto Nacional de Medicina Tropical Dr. Carlos Malbrán de Misiones, llevó adelante este hallazgo y dialogó con Unidiversidad sobre las características de esta especie, su importancia sanitaria, los factores sociales que propician su traslado y las condiciones climáticas que necesita.

“Todo comenzó con un llamado desde una maderera local de San Rafael, donde un trabajador de la madera avistó un escorpión. Al desconocerlo, me envió una foto. Intrigado, decidí investigar más a fondo y, tras confirmar la identificación del ejemplar, me puse en contacto con un amigo y colega, Carlos Ariel López, herpetólogo del Instituto Nacional de Medicina Tropical Dr. Carlos Malbrán de Misiones. Juntos, determinamos que se trataba de un 'Tityus bahiensis', una especie muy agresiva que no había sido registrada en esta zona del país”, relató.

La especie "Tityus bahiensis" se caracteriza por un doble aguijón. Foto: Marcos Jannello, biólogo e investigador del Conicet

Según el investigador, en Argentina existen aproximadamente 60 especies de escorpiones, divididas en dos familias principales: Bothriuridae y Buthidae. De las diez especies pertenecientes a la familia Buthidae, cuatro son de importancia sanitaria debido a su capacidad de causar cuadros clínicos graves tras sus picaduras. Entre estas, se encuentra Tityus bahiensis, junto con Tityus carrilloi, Tityus confluens y Tityus serrulatus.

“Estas especies, sobre todo la hallada, son comunes en provincias como Misiones y Entre Ríos, y en Brasil es responsable de numerosos casos de escorpionismo, en el que las picaduras pueden requerir hospitalización. Ahora bien, la presencia de este escorpión en Mendoza se atribuye al transporte inadvertido en cargas de madera procedentes de Eldorado, Misiones. El ejemplar fue encontrado entre las planchas de madera, lo que sugiere que llegó accidentalmente a la región”, detalló el investigador del Conicet.

Para identificar al ejemplar, los científicos analizaron sus características morfológicas y patrones de coloración. “Este escorpión tiene un cuerpo de color café oscuro, patas amarillo-rojizas y pedipalpos con manchas oscuras. Sus pinzas son delgadas y largas, y presenta un telson con apófisis subaculear y un tubérculo subaculear espinoideo, es decir, un segundo aguijón muy pronunciado en su cola. Además, hablamos de un ejemplar que alcanza los 4,4 cm de largo”, explicó Jannello.

Mapa de distribución de las 60 especies de escorpiones en la Argentina. Foto: Marcos Jannello, biólogo e investigador del Conicet

Jannello advirtió que la presencia de unos pocos individuos de una especie exótica no necesariamente implica el establecimiento de una población en Mendoza. No obstante, el constante aumento del comercio y el transporte humano podría cambiar esta situación, aunque es una situación muy poco probable. “Las condiciones climáticas de la región, que son muy secas, dificultan la adaptación y reproducción de esta especie. Sin embargo, si el flujo de casos aumenta y las condiciones ambientales se modifican, estos escorpiones podrían asentarse, aunque tienen que cambiar muchos factores ambientales para que eso suceda”, remarcó.

Este es el cuarto registro de Tityus bahiensis fuera de su área natural desde 2018. Aunque en Argentina no se han registrado casos graves de escorpionismo causados por esta especie, sí se han reportado en Brasil. Por lo tanto, especialistas subrayan la importancia de estar preparados e informados. Recomiendan contar con sueros específicos y capacitar al personal de salud pública para enfrentar posibles incidentes causados por escorpiones transportados accidentalmente. “En caso de avistar un escorpión, se aconseja mantener la distancia y contactar a las autoridades sanitarias. Los síntomas de una picadura pueden incluir hinchazón, dolor agudo, punzante e intenso, y efectos en el sistema nervioso, aunque actualmente no representan una amenaza significativa en Mendoza”, afirmó.

Escorpión hallado en el sur provincial. Foto: Marcos Jannello, biólogo e investigador del Conicet

Tratamiento

Según la Guía de Prevención, Diagnóstico, Tratamiento y Vigilancia Epidemiológica del Ministerio de Salud de la Nación, las picaduras pueden ser especialmente peligrosas en niños, ancianos y personas con problemas de salud preexistentes, como hipertensos, cardiópatas, diabéticos, etc., el tamaño corporal del accidentado es importante en el envenenamiento, siendo más sensibles aquellos de menor peso a igual dosis de veneno inoculado. Ante la confirmación o sospecha de una picadura de escorpión, el o la paciente debe ser trasladada con urgencia a un centro de salud u hospital más cercano a fin de realizar la correspondiente evaluación médica para la caracterización de la gravedad del envenenamiento y, si fuese necesaria, la aplicación del antiveneno específico.

Características de la especie de "Tityus bahiensis". Foto: Marcos Jannello, biólogo e investigador del Conicet

Medidas de prevención

La mayoría de los accidentes se producen en el domicilio, por lo que las medidas de prevención deben estar orientadas a evitar el ingreso de los alacranes a la casa y tener precaución en aquellos sitios donde se los puede encontrar.

Protección personal

• Revisar y sacudir las prendas de vestir y el calzado antes de vestir o calzar, especialmente si han quedado tiradas en el suelo;
• Sacudir la ropa de cama antes de acostarse o acostar un bebé o niño. En las patas de la cuna se pueden colocar frascos de vidrio para evitar el ascenso de los alacranes;
• Tener precaución cuando se examinan cajones o estantes. Retirar progresivamente los elementos de su interior en lugar de introducir la mano o revolver;
• Evitar caminar descalzo en zonas donde se conozca la presencia de escorpiones.

Protección intradomiciliaria

• Utilizar rejillas sanitarias, o de trama adecuada o con protección sanitaria en desagües de ambientes y sanitarios;
• Controlar las entradas y salidas de cañerías, así como las aberturas y hendiduras;
• En puertas y ventanas, conviene colocar burletes donde queden hendijas. También puede utilizarse alambre tejido (mosquitero). Hacer lo mismo con las rejillas de desagües;
• Revocar las paredes, reparar las grietas en pisos, paredes y techos;
• Control de cámaras subterráneas, cañerías, sótanos, huecos de ascensor y oquedades de las paredes en los que pueden encontrarse.

En el ámbito peridomiciliario

• Realizar aseo cuidadoso y periódico de las viviendas y alrededores;
• Efectuar control de la basura para reducir la cantidad de insectos que sirven de alimento a escorpiones;
• Revisar cuidadosamente la hojarasca y los escombros y evitar juntarlos con las manos.

Doble Aguijón. Foto: Marcos Jannello, biólogo e investigador del Conicet