Educación inclusiva: un curso de la UNCUYO para fortalecer derechos de las personas con discapacidad

Sociedad

“Esto es lo más lindo que nos podía ocurrir. Creíamos que, por la edad de nuestro hijo, esta posibilidad no se iba a presentar, pero pasó y es hermoso. La verdad es que cuesta creerlo”, expresó la madre con emoción en su mirada. 

Estos talleres recreativos se dictan en el Parque O’Higgins y en la Federación de Box bajo los conocidos protocolos sanitarios. Las clases están a cargo de Nelson Funes, uno de los primeros talleristas municipales con síndrome de Down. No obstante, el joven no está solo, ya que lo acompaña la profesora Catalina Bertochi. 

“Actualmente, estamos con un plan de becas profesionales con experiencias laborales reales. Básicamente, la idea es que las personas con discapacidad puedan interactuar con otras y desenvolverse en el campo laboral sin sus padres o tutores y, de esa manera, puedan lograr cierta independencia. Ellos están acompañados por responsables del Área de Inclusión y Accesibilidad que los apoyan  en cada paso”, explicó Nicolás Reynaga, encargado del sector.

Tanto Jesús como Haydée manifestaron su profundo agradecimiento hacia la Municipalidad de Capital. Para ellos, este tipo de iniciativas para personas con discapacidad es un gesto muy positivo y que genera esperanzas de gestar una verdadera inclusión. 

Nelson, un campeón con todas las letras

Nelson es el menor de tres hermanos y, según su madre, es “el más mimado”. Al ser diabético y celíaco, el joven siempre necesitó más cuidados, por eso sus padres han sido su principal sostén. 

“Para nosotros, él es nuestra razón de vivir. Nos ha dado tantas alegrías que no tenemos palabras para describir todo lo que Nelson significa para nosotros. Ha sido campeón de natación, de folklore, de patín. Tiene más de 300 medallas y más de 50 trofeos”, comentó Haydée.

Es por eso por lo que su familia resalta que Nelson es una persona con mucho carácter y una personalidad marcada. Es muy sociable y perseverante cuando se trata de conseguir lo que desea. 

Nelson patina desde los 16 años. Foto: Elizabeth Montecinos Pincheira

Actualmente Jesús y Haydée están jubilados, pero toda su vida trabajaron. Él lo hizo como dueño de una empresa constructora, y ella, como diseñadora textil, labor que sigue ejerciendo desde su hogar, donde tiene montado un taller de costura.