En Gimnasia se viven jornadas de incertidumbre por varios motivos: hay elecciones en los próximos días y la candidatura de Fernando Porreta está en duda; la dupla Alaniz-Abaurre no continuará en el cargo y el próximo DT es una incógnita. Además, el extécnico del equipo, Marcelo Fuentes, acusó al presidente de la institución de la compra de árbitros para lograr el ascenso, lo que causó mucha sorpresa y dolor en el ámbito mensana.

En el horizonte está la tranquilidad de haber conseguido el ascenso a una B Nacional que, por lo menos en su próxima edición, no tendrá descensos. De toda la actualidad del elenco del Parque habló el exjugador y mánager de la institución, Julio Guido Díaz.

¿Qué clima se vive en estos días en el club luego de esta noticia?

Hay situaciones que son antipáticas, uno quisiera dar siempre noticias buenas y a veces el fútbol te pone en la situación de que no todas las noticias son agradables o son buenas. Ayer a la tarde (por el lunes) le informamos al Lechuga (Alaniz) y a Martín (Abaurre) que la comisión había decidido optar por otra conducción en el plantel. A veces hay que tomar decisiones con la cabeza y no con el corazón. La verdad que no fue sencillo informar esta noticia porque hay un cariño de por medio, porque son dos seres humanos que tienen valores importantes y porque son de la casa.

¿Cuáles fueron los principales motivos que consideró la cúpula dirigencial de Gimnasia para tomar esta decisión?

Nosotros siempre planteamos el proyecto como dupla técnica y la verdad es que no estaba totalmente aceitada la relación, porque en el proyecto ellos ponían al Lechuga como técnico y a Martín como ayudante de campo. Y no quiero ahondar en detalles del proyecto porque en realidad, por ahí había falta de contenido y había una serie de cosas que, ya está, nos guardamos, nos reservamos. Entendía la dirigencia en forma unánime que había algo de improvisación y me parece que el desafío de la categoría, la importancia del torneo, no fue dada como requería. Faltó comunicación, faltó armado del trabajo, faltó, dentro de la composición del cuerpo técnico, gente con alguna experiencia en la categoría. Creo que la dirigencia evaluó esa situación y tomó la decisión.

¿A dónde apunta la dirigencia de Gimnasia en cuanto a nombres? ¿A proyectos o a características del técnico?

La dirigencia de Gimnasia se ha caracterizado por analizar minuciosamente las situaciones. Nosotros, creo que, por ahí, hemos tomado decisiones que no han sido sencillas de tomar y hago una cronología muy chica. Cuando quedamos afuera en la final del torneo pasado entendíamos que por ahí nos faltaron detalles que tenían que ver con mayor experiencia de algún técnico en la categoría. Por eso tomamos la decisión de buscar a Marcelo Fuentes y desde lo deportivo nos cumplió, porque sacó el 71 % de los puntos y en torneos nacionales es el técnico que más puntos ha sacado en la historia de Gimnasia. Después queda desvalorizada esa situación a partir de sus equilibrios emocionales y el desenlace que tuvimos, más tuvo que ver con actitudes de él que con la cuestión deportiva. Hoy apuntamos a un proyecto con un técnico de la categoría, fundamentalmente con experiencia, que tenga un sistema de juego acorde a la historia de Gimnasia y que tenga una edad media con haya muchas energías y muchas ganas de trabajar.

¿Están en consideración los nombres de Walter Perazzo, Pacha Cardozo, Diego Osela y Sergio Arias para ser técnicos de Gimnasia?

Perazzo tiene su continuidad asegurada en Chicago hasta fin de año. Diego Osela arregló hace diez días en Chile. Pacha Cardozo presentó la carpeta de su proyecto y está en el análisis, y con Toti Arias no hemos entablado ninguna conversación.

¿Tenés algo que decir en cuanto a las declaraciones de Fuentes sobre la compra de árbitros y del presidente con respecto al ascenso conseguido por Gimnasia?

Creo que fue un exabrupto, fue algo que, la verdad, ni la institución, ni el presidente ni los jugadores merecían que dijera. Tengo entendido que ha pedido disculpas. Respeto sus dichos, pero la verdad es que nos hubiera gustado que pidiera disculpas públicamente en los medios. Para nosotros es un hecho finalizado porque no le queremos dar más trascendencia.

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