Los ingresos por concurso siguen demorados y desde los gremios culpan al Gobierno, al asegurar que es el responsable de que se hayan frenado las vacantes por los decretos de congelamiento que implementó la administración de Francisco Pérez durante los últimos cuatro años. El punto que destacan es que, como Pérez mandó en sus cuatro presupuestos un artículo que establecía el congelamiento de los ingresos al Estado, no se produjeron vacantes, aunque remarcan que quienes sí lo hicieron fueron los funcionarios de alto rango, al menos en la Administración Central.

La dirigente sindical Raquel Blas descalificó los dichos del Gobierno al asegurar que los ingresos se vieron demorados por culpa del propio Estado, pero además porque quisieron implementarlos sólo en algunos ministerios y no en todos:

“Nosotros rechazamos de plano que se eligieran a dedo las reparticiones, porque debe ser para todos los ministerios y se deben publicar en todos los medios para que no sean para unos pocos”, insistió la combativa dirigente.

Tras el decreto de Jaque

A pesar de que demandó cuatro años su reglamentación, aún no se publica el primer cargo público para la Administración Central que será elegido en período democrático. Se trata de un chofer para el Ministerio de Cultura que lleva igual tiempo en veremos y que iba a funcionar a modo de prueba piloto para después dar a conocer todas las vacantes. Según el Gobierno, hay escollos por parte de los gremios, pero desde los sindicatos señalan al Ejecutivo y hablan de falta de voluntad política para implementar el procedimiento.

Lo cierto es que aquel decreto que se anunció en 2011, y que reglamentaba una ley de 2009, aún no se puede aplicar. Hoy se transita la etapa final del armado de los pliegos para el chofer que será convocado por Cultura a través de los medios. El gobernador Francisco Pérez ha dado la orden de que se produzca antes del 30 de junio, día límite para imputar partidas para personal, según establece la Ley de Responsabilidad Fiscal y teniendo en cuenta que este año hay elecciones, lo que establece un cepo más acotado.

Blas dice que otro de los motivos por los que se demoraron los concursos es que debían estar integrados todos los jurados y el Gobierno no ha puesto sus delegados. En una de las actas paritarias aún sin homologar consta que se llamará a la conformación a partir de los 30 días de publicada, pero aún no está ratificada por la Legislatura.

Una de las demoras señaladas por Mauricio Grispan, asesor del Ministerio de Cultura que está a cargo del primer ingreso por concurso, es que este chofer debía superar una evaluación actitudinal. La discusión se trabó en quién era el encargado de realizar un testeo de este tipo. Por esto los gremios exigieron que se convocara un psiquiatra, a un médico laboral y a un psicólogo. Todo esto, sólo para evaluar si el chofer tiene actitud para enfrentar el trabajo. Así lo explican desde el sector oficial. Sin embargo, Blas niega de plano que esto esté sucediendo: "Lo único que pedimos es un examen psicofísico, como para ingresar a cualquier tipo de trabajo", dijo.

En el medio de esta polémica siguen los cruces entre oficialismo y oposición porque estos últimos denuncian un ingreso irrestricto por parte de la administración actual y contabilizan unos 12 mil empleados más en los cuatro años de gestión justicialista.