La guionista, dramaturga, directora de teatro, actriz y docente Mariana Levy -junto a la periodista Tali Goldman- analizaron en clave feminista la serie de Netflix más vista a nivel mundial: "Gambito de Dama". Levy dialogó en Radio U sobre el artículo completo que fue publicado en Revista Anfibia. “Es una ficción que explora la vida de una huérfana prodigio del ajedrez llamada Beth Harmon desde los ocho a los veintidós años, mientras lucha contra la adicción en la búsqueda de convertirse en la mejor jugadora de ajedrez del mundo”, tal como describe el argumento de la propia información de la plataforma.

“En la historia de lo audiovisual hay determinadas situaciones que, por cómo está filmada, ya se entiende hacia dónde va la escena. Esta serie trabaja con estas situaciones repetidas en series y películas y las desactiva, te lleva a esos lugares, te muestra lo que estás pensando, pero va para otro lado”, explicó.

Se trata de la historia de la adaptación de un libro con el mismo nombre, escrito por Walter Tevis en 1983.

“Ningún personaje es lo que quisiéramos que fuera. Se plantea todo un abanico de posibilidades con respecto a los personajes mujeres, donde a ella lo que le permite ser quien es son una serie de mujeres como la madre adoptiva, la amiga, la directora del orfanato. Me parece que es muy refrescante”, dijo Levy.

Es decir, según escribieron las autoras del análisis de la serie, en Gambito de Dama no hay misterio pero sí hay efectos sorpresa que revierten todos los lugares comunes y estereotipos a los que estamos acostumbrados como espectadores de series.

"Sabemos, con solo leer la sinopsis, que efectivamente Beth Harmon (la protagonista) se convertirá en la mejor jugadora de ajedrez del mundo: ella es una niña genio, va a triunfar, está condenada al éxito. Acá no hay intriga en cuanto al desenlace. La serie toma una estructura tradicional y muy transitada. En las películas y series de deportes, para poder triunfar en la disciplina que lo obsesiona, nuestro/a protagonista tiene que enfrentar muchas pruebas, pero, en última instancia, se tiene que enfrentar consigo mismo/a. Hasta acá, Gambito es predecible. Sin embargo, tanto Beth Harmon como los personajes que en apariencia son muy tradicionales y muy transitados, hacen algo completamente inesperado. Y en eso radica nuestra fascinación", explican en su nota.

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