Esta es la historia de una banda de rock barrial. Se largaron un día como un dúo y tuvieron que llamar a los amigos porque, al poco andar, se dieron cuenta que tanta música y gente no se puede abarcar siendo solamente dos. Hace apenas cinco años que están rockeando, se los vio en los bares más famosos de Buenos Aires, recorrieron algunos barrios, estuvieron en La Trastienda; Cosquín Rock los recibió junto a La 25, Los Gardelitos, entre otros. El sábado 8 de septiembre se presentan en La Mala (Alameda, Ciudad, Mendoza), a las 22. Salta la Banca, y salta alto.

Corría el invierno del 2007 cuando Santiago Aysine (Insolubles) dio con Alberto Grammatico (Inmaduros del Carajo). La idea era hacer algo acústico, que estuviera abocado a expresar vicisitudes, cotidianeidades, historias y otras contundencias de las que nadie está eximido. En una entrevista para la Rolling Stone cuentan sin complejos: “Nos decían que éramos los Arjona del rock, que hacíamos letras para minitas".

La historia del grupo dice que “de a poco, comenzaron a establecer espontáneamente días para juntarse a grabar algunas canciones que Santi tenía en su repertorio: fueron 2, 3, 4… 12 canciones. Y el boca a boca se hizo mecha. Tomás Calvo (Chispa), aficionado de ese ensamble, se ofreció a organizar una fecha. La primera cita fue un martes del mes de noviembre. El lugar: Makena, Palermo. El bar se llenó de familiares, amigos y algún que otro desconocido. La recaudación de aquella noche sirvió para adquirir discos vírgenes y 200 impresiones para difundir su música. Con ese material, destinado a regalarse, partieron hacia la Costa Atlántica. Ningún disco volvió…”

Los temas se viralizaron de MP3 en MP3, por las redes sociales, y a la vieja usanza: de boca en boca. Proporcional a la rápida propagación de sus canciones, aumentaba el público. Para su segundo toque contaban con un demo: Increíble, temas nuevos y amigos como Marcelo Scola poniendo su saxo y Santiago Pili Maggi en teclados. Aquella fecha fue el puntapié del grupo que dos meses después se dio a conocer como Salta La Banca. Más tarde se sumaron Cecilia Grammatico (batería), Gonzalo Sosa (bajo), Mauro Ostinelli (saxo), quien se acopló en los caños para hacer sesiones con Marce, y Mariano Anselmi, como segunda guitarra.

Y continuaron. “Llegó el invierno del 2009, y a dos años ver las tablas por primera vez, nació su primer disco: ‘Ya no somos dos ahora’. El disco salió a la venta en julio y fue presentado oficialmente un mes después en Buenos Ayres Club, San Telmo, con localidades absolutamente agotadas. La cita se repitió en septiembre y con el mismo resultado: nuevamente, Buenos Ayres Club se colmaba”, se lee en la biografía de Salta La Banca. 

“Ningún integrante tiene más de 30 años, y de una forma muy concreta representan a una generación de músicos post-Cromañón: Aysine es sobreviviente de la tragedia y, para el primer disco oficial de la banda (Ya no somos dos ahora, 2009), compuso una canción que tituló Que no se repita, con un recitado de Bertolt Brecht. Dice que la escribió en una época "muy heavy".Que todavía tenía ataques de pánico por lo que había vivido esa noche del 30 de diciembre  del 2004. Que le costaba salir de la casa. En su brazo derecho, tiene tatuada una frase de la película V de Venganza: "Una revolución sin baile no vale la pena". Es hijo de padres marxistas y, durante la nota, cada tanto revisa su Twitter para seguir las repercusiones que tuvo el último discurso de la Presidenta ("sólo sigo a pensadores de izquierda", asegura)”, refleja la revista Rolling Stone en la nota realizada el 06 de enero del 2012.

La primera gira por la Costa Atlántica contó con más de ocho presentaciones entre San Bernardo, Villa Gesell y Mar del Plata, donde se entregaron más de 500 E.P. gratuitos a la gente de todo el país que se acercó a sus shows. Sin embargo, tiempo después y por cuestiones personales, Marcelo Scola y Mariano Anselmi dejarían de formar parte de la banda. Luego, Cecilia Grammatico (batería) se despediría del grupo dejándole el banco a Julián Baranchuk.

El 2010 les dejó como saldo la participación en el Zona Rock junto a Ciro y Los Persas, Las Pelotas, Cuarteto de Nos y El Bordo. Pero el año 2011 no se quedaría atrás con las nuevas buenas. Un año a puro toque, colmando cada lugar, era señal de que se acercaba el momento de hacer un párate obligado: era hora de meterse al estudio a grabar Seremos. 

La presentación tuvo lugar en Groove, Palermo, el 28 de mayo. Sin lugar a dudas, éste fue el paso más importante en la corta carrera musical de Salta La Banca. A sala llena, ante más de 1.900 personas, tocaron todos los temas del nuevo disco y repasaron algunas producciones anteriores. El año siguió su curso y con el correr de los meses los shows se fueron multiplicando y con ello, los éxitos: en agosto de ese año la Rock & Pop los seleccionó como banda invitada para cerrar la fiesta de El Bombardero del Demo, formaron parte de la grilla del Zona Rock de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza, por nombrar algunos logros. Sin embargo, el plato fuerte llegó para mediados de octubre, cuando Salta La Banca se presentópor triplicado en La Trastienda, con entradas agotadas.

Para no ser menos, el 2012 arrancó con una grata noticia: Cosquín Rock iba a recibirlos. Fue un show corto, pero no por eso menos caluroso. Allí, compartieron escenario con Callejeros, Los Gardelitos y La 25, entre otros, en lo que fue una experiencia inolvidable. 

Salta la Banca, anda saltando bancas por el interior del país, ahora toca en Mendoza, el 8 de septiembre a las 22 en La Mala (Alameda, Ciudad).

Ficha técnica: Santiago Aysine (Voz), Alberto Grammatico (Guitarras y Coros), Gonzalo Sosa (Bajo), Julián Baranchuk (Batería), Santiago Maggi (Teclados), Mauro Ostinelli (Saxo Alto y Tenor), Ramiro Maidana (Armónicas), Contacto: Tomás Calvo (Mánager).

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