La agencia Amaq, vinculada al EI, informó este martes 19 que el joven afgano de 17 años era uno de sus “combatientes” y que “ejecutó su operación en respuesta a los llamados a atacar a los países de la coalición que combate contra el Estado Islámico", poco después de que se hiciese público el hallazgo de la bandera del ISIS en la habitación del joven.

El autor de la agresión era un solicitante de asilo afgano de 17 años, según indicó el Gobierno alemán. Ayer, lunes 18, atacó por la noche con un hacha y un cuchillo a los pasajeros que se encontraban en un vagón de un tren regional que cubría un trayecto entre la pequeña localidad de Treuchtlingen, en el centro-oeste de Baviera, y la ciudad de Wurzburgo. Como consecuencia de la agresión, cinco personas resultaron heridas, cuatro de ellas de gravedad. Las víctimas son turistas originarios de Hong Kong. El atacante fue abatido a tiros por una unidad especial de la policía.

Varios testigos dijeron que durante el ataque en el tren el joven gritó "Allahu Akbar" (Alá es grande"). Además del grito, el ministro del Interior de Baviera, Joachim Herrmann confirmó que, durante los registros realizados en la habitación del atacante los investigadores encontraron una bandera del ISIS pintada a mano así como otros documentos escritos con grafía árabe y latina.

No obstante, el ministro declaró que no existían indicios de que el joven fuera un miembro del ISIS, en sintonía con la directiva alemana de bajarle el tono al alarde de la organización y evitar el uso del término terrorismo, el cual sin duda puede causar temor en la población del país europeo que más refugiados recibe. Así, las autoridades alemanas se inclinan más por la hipótesis de que se trató de un "lobo solitario", adoctrinado por cuenta propia.

Horror y sorpresa

Desde el entorno del muchacho no se explican lo ocurrido y los trabajadores del centro de refugiados de la localidad de Ochsenfurt, donde residió durante varios meses, se mostraron afectados al enterarse de la noticia. “Estamos en contacto estrecho con los refugiados y al respecto sólo podemos decir cosas buenas”, aseguró una vocera del personal que trabaja en el albergue.

Entre los más de 250 refugiados que en la actualidad residen en este centro se encuentran alrededor de 60 menores de edad que llegaron solos a Alemania. “Entre nosotros no ha habido por el momento ningún incidente. El trato de unos con otros es bueno y de carácter pacífico. Por eso estamos todos horrorizados y tristes”, señaló.

Según datos del Ministerio del Interior de Baviera, el adolescente llegó solo a Alemania hace alrededor de dos años y en 2015 se inscribió como solicitante de asilo ante las autoridades del país centroeuropeo. Tras residir desde marzo en el centro de Ochsenfurt, el joven se había mudado recientemente a la casa de una familia de acogida.