Marcelo Romano, senador provincial (Protectora), habló en Radio U sobre el pedido de desafuero en su contra que se votará el 26 de mayo en la Legislatura. Aseguró que se trata de una "persecución política por parte del oficialismo", iniciada luego de que denunciara irregularidades en la licitación de la obra Portezuelo del Viento.

Romano está imputado por presunto “atentado contra la autoridad” durante un supuesta discusión con la policía el 11 de agosto de 2019, cuando patrulleros demoraron en la ruta a su hija al volante de un Renault Clio. El senador explicó que, luego de ese evento, le mandó un mensaje al ministro de Seguridad, Gianni Venier. "Le dije que seis patrulleros me parecía un despropósito para una sola persona, sea mi hija o no. El ánimo del mensaje fue para que se distribuyeran mejor los recursos. En ese momento, los policías no dijeron nada en el 911, luego hicieron la denuncia en la fiscalía diciendo que yo les había gritado. En todo caso, eso no es un delito, es una contravención", señaló.

Sobre el desafuero que la fiscal Gabriela García Cobos pidió, Romano declaró: "El objetivo del Gobierno es perseguir opositores que molestamos. No tiene pie ni cabeza eso de lo que se me acusa. El linchamiento mediátio coincide con las grandes movilizaciones de las cuales formamos parte en diciembre (en contra de la modificación de la ley 7722), después pasó el tiempo y ahora responsabilizo este pedido con la denuncia que hice contra la licitación de la obra Portezuelo del Viento y su pliego direccionado para grupos extranjeros, entre otras irregularidades".

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