Isla de Calor: la Ciudad registra diez grados más que los bordes del Gran Mendoza

Sociedad

“Sabemos que la situación en cuanto a las emisiones ha cambiado. Podemos trazar algunos números y guiarnos por las estadísticas, pero la verdad es que en la actualidad no tenemos forma de medir los niveles de contaminación en el aire. Creo que es el punto más importante a tener en cuenta y un reclamo necesario a los funcionarios provinciales y nacionales. Esto no pasa solamente en Mendoza, sino que funciona mal en todo el país, hay tan solo un puñadito de estaciones en toda la Argentina: en el Gran Buenos Aires hay tres o cuatro, centralizando la más importante en la ciudad de Bahía Blanca. Después hay una en Córdoba, pero nada más. De hecho, si lo comparamos con una ciudad de Sudamérica, Mendoza debería tener las mismas estaciones de monitoreo que tiene la ciudad de Arequipa (Ecuador), que consta de tres estaciones”, destacó en primera instancia el investigador del Conicet.

En cuanto a la decisión política que se debe tomar, Puliafito consideró que hay varios aspectos que se tienen que mejorar: “Debemos entender que hay tres aspectos claves a tener en cuenta: primero, el responsable de la calidad del aire es el municipio, pero todos sabemos que los municipios por lo general no tienen la capacidad técnica para mantener una estación de monitores; segundo, las provincias deberían por lo menos subsidiar de alguna manera los costos generados por los mismos municipios (algo que la provincia había hecho durante algún tiempo, pero ya no más); y tercero, se deberían generar los acuerdos necesarios entre la Nación y las provincias para comprar los equipos necesarios (valen alrededor de un millón de dólares)”.

Para el especialista, el problema central es que en Argentina -y también en Mendoza- la calidad del aire no es buena, pero tampoco terriblemente mala, entonces funcionarios y funcionarias no tienen asociado el problema de salud a la mala calidad del aire. "Esto trae aparejado que solo se interesen e interioricen en el tema cuando pasa alguna situación grave o de fuerza mayor”, remarcó Puliafito.

Foto: Ramiro Gómez / Télam

¿Cuántas estaciones de monitoreos debería tener Mendoza?

Mendoza tuvo en su momento algunas estaciones de monitoreo, pero con el paso del tiempo y la poca restauración de los equipos se fueron degradando y dejando de lado. En la actualidad el único de los equipos —que no está operativo— se encuentra en el INV y está a cargo de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO), a través de la Dirección de Estudios Tecnológicos e Investigaciones (DETI), pero solo se usa cuando hay algún tipo de emergencia, como por ejemplo el vuelco de un camión que transporte sustancias ácidas o contaminantes o la quema considerable de pastizal o basura.

“Debemos tener en cuenta que en la zona del Gran Mendoza se deberían establecer tres estaciones de monitoreo para medir la calidad del aire, mientras que hoy no tenemos ninguna. Además, se debería ubicar otra en alguno de los departamentos del sur provincial, ya sea en Malargüe o San Rafael. Luego, se debería realizar un análisis de la instalación de acuerdo a una estimación en base a la cantidad y densidad de la población, las actividades que hay en el sector donde se va a ubicar, los condicionamientos del uso del suelo, si hay zonas residenciales, las ubicaciones de las zonas industriales, el tránsito, etcétera”, completó el investigador.

Foto: Ramiro Gómez / Télam

Estaciones de monitoreo "low cost"

Las estaciones de monitoreo "low cost" de la calidad de aire se están convirtiendo en una herramienta cada vez más popular y accesible para medir y evaluar la contaminación atmosférica. Estos dispositivos asequibles y de fácil uso permiten a las comunidades y a sus habitantes monitorear la calidad del aire en tiempo real y obtener datos precisos sobre la concentración de contaminantes. Esta nueva generación de estaciones de monitoreo ha “democratizado la vigilancia de la calidad del aire”, brindando a las personas la capacidad de tomar medidas informadas para proteger su salud y el medio ambiente.

“Por suerte, ahora están surgiendo a nivel internacional equipos de medición, los cuales comúnmente son denominados como equipamiento "low cost". Estos equipos si bien no miden con la misma calidad o precisión que los equipamientos de investigación, son muy útiles y funcionales para un primer análisis. Al ser accesibles, muchas personas en todo el mundo están conformando una 'red de monitoreo ciudadana' que no depende de ningún gobierno y que está generando una mayor concientización de la calidad del aire”, afirmó el docente de la UTN.

Aquí en la provincia existen varias estaciones "low cost" que miden la calidad del aire. Entre las más conocidas se encuentra la estación de Ciudad, ubicada en el punto más alto del edificio de la municipalidad; también está la estación de Godoy Cruz, situada en la plaza departamental, y la estación de Maipú, que se está reubicando, ya que antes estaba en la plaza departamental de ese municipio. Cabe señalar que estas estaciones "low cost" ubicadas en estos tres dapartamentos tienen como función estudios muy específicos y no pueden reemplazar de ninguna manera los equipamientos que necesita la provincia para realizar un análisis completo y profundo.

Finalmente, para Puliafito lo bueno de establecer estas redes "low cost" es que la ciudadanía empieza a preocuparse por la temática y a tener un poco más de conciencia. “Estas estaciones sirven para realizar estudios específicos y muy interesantes. Por ejemplo, nosotros teníamos un convenio con una ONG de Chile, por medio del cual nos cedieron cuatro equipos "low cost". Estos los instalamos en el municipio de Capital con el objetivo de medir la calidad del aire y el nivel de contaminación en algunas escuelas de Ciudad, sobre todo en los establecimientos de la primaria”.