Sudáfrica 2010 quedará en el recuerdo por ser el primer mundial disputado en África, las interminables y aturdidoras vuvuzelas y el regreso de Diego Maradona a la Copa del Mundo, esta vez como entrenador.

El astro argentino se había desenvuelto como técnico en dos oportunidades, fue cuando aún era jugador y el Deportivo Mandiyú y Racing fueron los clubes que confiaron para que el 10 siga en el mundo del fútbol. Las experiencias no habían sido buenas: 12 partidos dirigidos en Corrientes con un 8,3 por ciento de efectividad; 11 en la Academia, con apenas un 18,1%.

Maradona reemplazó a Alfio Basile en Argentina a fines del 2008 luego de una derrota ante Chile por las Eliminatorias Sudamericanas 2010.

El primer partido fue en Glasgow, capital escocesa, y fue triunfo de la Albiceleste ante el combinado local por 1-0 con gol de Maximiliano Rodríguez.

En el 2009, Argentina venció a Francia como visitante en un amistoso y a Venezuela por las Eliminatorias hasta que llegó el fatídico 1° de abril con la goleada histórica frente a Bolivia por 6-1.

Tras esa paliza todo fue cuesta arriba. Si bien consiguió algunos triunfos, los partidos claves fueron derrotas como ante Ecuador, Brasil y Paraguay.

En la última doble fecha de las Eliminatorias, Argentina debía ganar para depender de sí mismo y así fue. Primero gracias a la inolvidable noche en el Monumental ante Perú y el gol agónico de Martín Palermo, para luego viajar a Montevideo en busca del triunfo tranquilizador.

Mario Bolatti convirtió el único tanto en la victoria ante Uruguay y Argentina se metía en el Mundial de Sudáfrica con mucha angustia y envuelto en mucha polémica.

Maradona tuvo en un año y medio 108 jugadores convocados a la Selección Argentina entre los partidos oficiales y los amistosos en las fechas FIFA.

EL MUNDIAL
Ya en Sudáfrica, Argentina liderada por Diego desde el banco y Lionel Messi en la cancha ganó los tres partidos del Grupo B a Nigeria (1-0), Corea del Sur (4-1) y Grecia (2-0).

Vale la pena repasarlos uno por uno: contra Nigeria, el gol llegó a los seis minutos por intermedio de Gabriel Heinze. Pudo haber sido más amplio el resultado de no haber tenido el seleccionado africano al buen arquero Vincent Enyeama.

Ante Corea del Sur, la cosa fue diferente. Aplastante 4-1 con un triplete de Gonzalo Higuaín y un restante tanto de Park Chu-Young, en contra.

Ante Grecia, para redondear una fase de grupos ideal, la Albiceleste ganó con tantos de Martín Demichelis y Martín Palermo, quien se dio el gusto de debutar en una cita mundialista. El Titán ingresó en el minuto 82 y en el 89 ya estaba gritando y abrazándose con Diego. Fue el partido en el que la Selección tuvo su mejor porcentaje de tenencia de balón: 67 por ciento.

Por tercera vez en la historia y por segunda vez consecutiva en dicha instancia, la Selección debía enfrentar a México. Fue 3-1 con doblete de Carlos Tevez, ya afianzado como titular, y otro de Gonzalo Higuaín.

"No nos comamos el chamuyo de Alemania", fue la frase de Maradona en la previa al partido contra los germanos por cuartos de final. Nuevamente, cara a cara con ese seleccionado en la misma instancia que en 2006. Esta vez no fue por penales, como cuatro años atrás, fue 4-0 contundente e inobjetable. De nada sirvió el 54 por ciento de posesión para la Albiceleste ante la efectividad de los rivales.

Esa fue la última vez de Diego en el banco de la Selección Argentina.