El Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) junto a integrantes del Frente Brasil Popular exigirán la realización de elecciones directas en octubre de este año para elegir el presidente del país y renovar el Congreso.

"Nosotros no podremos soportar más un gobierno impostor, golpista, que está acelerando todo lo que no hicieron en los últimos 30 años y quieren hacer ahora en algunos meses', manifestó el coordinador nacional del MST, Joao Pedro Stedile.

Sobre la necesidad de convocar a elecciones directas de manera urgente, Stedile subrayó la importancia de que estas permitan no solo proclamar al presidente, sino también conformar un Congreso que reemplace al actual, del que forman parte más de 300 legisladores citados en delaciones de la operación anticorrupción Lava Jato, según consigna la agencia de noticias Telesurtv.

El rechazo hacia la figura del mandatario interino, Michel Temer, aumentó hasta llegar a un 77 % en diciembre pasado, según una encuesta del Instituto Ipsos. Esto se suma al descontento que se generó tras la salida del poder de la presidenta electa, Dilma Rousseff, que hizo subir 18 puntos porcentuales la imagen negativa de Temer desde octubre hasta diciembre de 2016.

Los desafíos del MST

Stedile señaló que en 2017 el MST tendrá que impedir que se lleve adelante la proyectada reforma del sistema de seguridad social, la cual -explicó- traería graves consecuencias en particular para los trabajadores rurales, pero perjudicaría igualmente a los pequeños municipios de Brasil.

Otro reto para la organización fundada en 1985 en la ciudad de Curitiba consistirá en crear una gran alianza con todos los trabajadores y movimientos populares del país para retomar la lucha de masas. Al hacer un balance del 2016, el líder del MST aseguró que este constituyó una verdadera tragedia para la reforma agraria.