El aborto es una práctica que se realiza desde tiempos remotos. En todo el globo, su legislación es muy diversa y son pocos los países en los que no tiene restricciones. De hecho, en esas naciones, no fue legalizado hasta pasada la segunda mitad del siglo XX. Actualmente, Argentina e Irlanda son dos de los Estados que tienen restringido el aborto, pero en los que se debate y lucha por su despenalización y legalización.

Aunque en Argentina la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito existe desde 2005, se profundizó el debate -que ha abarcado a casi toda la población- desde febrero de este año. Fue cuando el presidente de la Nación, Mauricio Macri, “avaló” que se debata un proyecto para legalizar esta práctica en el Congreso y que se discutirá en el recinto de Diputados el próximo 13 de junio.

En este contexto, vale investigar cómo es la legislación sobre la interrupción voluntaria del embarazo en el resto del mundo. Hay un aspecto que se destaca con sólo mirar el mapa interactivo que acompaña a esta nota: el aborto está legalizado, en su mayoría, en países ricos. Mientras más económicamente desarrollado es el territorio, menos restricciones a la práctica.

La publicación de la Organización Mundial de la Salud de 2012, titulada Aborto sin riesgos: guía técnica y de políticas para sistemas de salud, especifica que en prácticamente todos los países desarrollados los abortos sin riesgos se ofrecen en forma legal. Y agrega que “en los países donde el aborto inducido legal está sumamente restringido o no está disponible, con frecuencia un aborto sin riesgos se ha vuelto en el privilegio de los ricos, mientras que las mujeres de escasos recursos no tienen otra opción que acudir a proveedores inseguros, que provocan la muerte.”

Según una publicación de Chequeado, el aborto es legal a petición o demanda de la mujer durante cierto período en Canadá, Estados Unidos, Uruguay, India, los “países de la antigua órbita soviética” (que incluye Ucrania, Lituania, Moldova y Rusia, entre otros) y en la mayoría de los países europeos. Por lo contrario, es ilegal y está penalizado por algún supuesto en gran parte de los países sudamericanos, africanos, en el Medio Oriente, en muchos de Oceanía y en el Sudeste Asiático.

Por otro lado, son cinco las naciones del mundo que prohíben la interrupción del embarazo bajo cualquier circunstancia y prevén penas de cárcel para toda mujer y persona que realice, intente realizar o facilite la ejecución de un aborto: Ciudad del Vaticano, El Salvador, Malta, Nicaragua y República Dominicana. Según un cálculo realizado en 2017, por año se producen alrededor de 25 millones de abortos inseguros en el mundo, en aquellos países en los que está penalizado. La misma cantidad, aproximadamente, se produce en lugares en donde es legal, con la diferencia de que éstos son seguros para la mujer.

En el siguiente interactivo se puede ver el mapa de la legislación del aborto. Aquellos países señalados con el número uno y que tienen un color rojo oscuro son aquellos en donde el aborto está permitido sólo para salvar la vida de la mujer o está totalmente prohibido. Los referenciados con el número 2 y de un rojo más claro, son donde el aborto se puede realizar “para preservar la salud” (es el caso de Argentina, por ejemplo).

Por otro lado, el tono fucsia se refiere a los países numerados con el tres, en los que se puede abortar por razones socioeconómicas. Finalmente, el tono violeta hace referencia a los países con el número cuatro, en donde el aborto se puede realizar “sin restricciones a la razón” de la mujer.

El caso de Irlanda

Irlanda se encuentra en una situación similar a la de Argentina, aunque su legislación con respecto a la de nuestro país es mucho más estricta. Sin embargo, el pasado 29 de enero, el Gobierno de Irlanda aprobó la realización de un referéndum sobre el aborto que se realizará hoy, viernes 25 de mayo. Fue anunciado por el Primer Ministro Leo Varadkar, quien considera que la prohibición genérica del aborto es demasiado restrictiva.

Por lo tanto, a los votantes irlandeses se les preguntará si desean derogar la octava enmienda de la Constitución aprobada en 1983, en el que se consagra el “derecho a la vida” tanto de la madre como del no nacido. Si los resultados son positivos, esta cláusula sería reemplazada por un texto que habilitaría al Parlamento de ese país para legislar sobre la interrupción voluntaria del embarazo.

Según un sondeo realizado por The Irish Times el 26 de enero de este año, en ese momento, el 56 % de la población estaba a favor de modificar la legislación sobre el aborto.