Para bajar la circulación de personas y evitar la propagación aún mayor del coronavirus, el gobierno provincial suspendió las reuniones sociales y los encuentros en bares. Sin embargo, para el cumplimiento de las medidas solicita que los mendocinos sean responsables y tomen conciencia. El turismo interno, los gimnasios y la actividad deportiva continúan habilitados.

A través del Decreto 935 y durante quince días, los mendocinos poseen dos restricciones que afectan exclusivamente a las reuniones sociales: juntadas familiares en domicilios particulares y reuniones en bares.

“En esta etapa on/off, decidimos suspender las reuniones sociales y los encuentros en bares, es decir, poniendo una pausa a situaciones y momentos que reúnen a una importante cantidad de personas, unas veces del mismo grupo familiar y las otras de distinta procedencia, lo que no permite un seguimiento o trazabilidad por parte de las autoridades sanitarias, ni mucho menos la presencia del Estado para controlar y detener el avance de la enfermedad”, explicó Víctor Ibañez, ministro de Gobierno, Trabajo y Justicia.

Rigen las nuevas medidas en Mendoza: qué cambia y qué sigue igual

A través del Decreto 935, publicado este martes en el Boletín Oficial, el gobernador Rodolfo Suarez establece la extensión del distanciamiento social, preventivo y obligatorio en todo el territorio provincial hasta las 24 del 18 de agosto. Nuevas medidas Se prohíben en todo el territorio provincial las reuniones familiares y/o sociales en casas.

Sin embargo, algunas actividades continúan permitidas durante los próximos días. Por un lado, el turismo interno se podrá realizar en la mayoría del territorio provincial, a excepción de: San Rafael, Lavalle, Santa Rosa, y cabecera o casco urbano del departamento de Malargüe, los cuales le solicitaron al Gobernador Rodolfo Suarez que se abstuviera de extenderlo en su territorio.

Por otro lado, continúan en funcionamiento los gimnasios y con estos la actividad deportiva previamente habilitada, apuntando con esa posibilidad a mantener la salud física y mental de la comunidad, y los ingresos de ese sector, cuyos establecimientos habían permanecido cerrados desde el inicio de la cuarentena y abiertos hace solo semanas.

De esta manera, la provincia de Mendoza no se suma a las jurisdicciones con restricciones más cerradas sino que apela una vez más al aislamiento voluntario como medida de impulso social y puntapié para frenar los contagios.

Los bares deberán servir comida para poder funcionar

El Gobierno de Mendoza dispuso el cierre de los bares, no así de los restaurantes y cafés, por 15 días desde este martes, tras el aumento de casos positivos de COVID-19.