El Estado Islámico se declaró responsable de la masacre de Las Vegas que dejó al menos 50 personas muertas y más de 200 heridos. El atacante de 64 años, que se suicidó luego del tiroteo, se habría convertido hace poco al Islam, aunque no trascendieron más detalles.

En un comunicado a través Amaq, la agencia de propaganda afín al ISIS, se aseguró que el autor del atentado es "un soldado del Estado Islámico". Hasta el momento, las autoridades de Estados Unidos confirmaron que el tirador es Stephen Paddock, un hombre blanco de 64 años que, atrincherado en su habitación del piso 32 del Mandalay Bay Resort & Casino, disparó a 22 mil asistentes que disfrutaban del Route 91 Harvest Festival. Luego del ataque, Paddock se suicidó.

Isis sólo detalló, hasta el momento, que el hombre que mató al menos a 50 personas "se convirtió al Islam hace varios meses", sin proporcionar más detalles. En tanto, un portavoz de la Policía explicó que el atacante estaba alojado en el hotel Mandalay Bay desde el 28 de septiembre.

 

Stephen Paddock, el asesino de Las Vegas, se suicidó luego del ataque. Foto: TMZ.

De acuerdo a lo publicado por Reuters, la agencia Amaq aseguró: "El ataque de Las Vegas fue ejecutado por un soldado de Estado Islámico y lo llevó a cabo en respuesta a los llamados a apuntar a los estados de la coalición", en referencia al grupo liderado por Estados Unidos que combate a los insurgentes en Siria e Irak.

La peor masacre de Estados Unidos

Anoche, cerca de las 22.45, un hombre armado abrió fuego desde el piso 32 del hotel Mandalay Bay; mató, al menos, a 50 personas e hirió a más de 400 en un festival de música country en Las Vegas. Luego se suicidó, disparándose sí mismo, según informó la Policía estadounidense.

La cifra de muertos, que según las autoridades todavía es preliminar, convierte al incidente de Las Vegas en el tiroteo más letal en la historia de Estados Unidos. En junio del año pasado hubo una masacre en un club nocturno de Orlando, donde 49 personas perdieron la vida.

Unas 22 000 personas estaban entre la multitud cuando el hombre armado abrió fuego, lo que generó pánico y los llevó a huir aterrorizados, incluso chocando unos con otros, mientras que los efectivos se apresuraban en localizar al atacante.