Esta semana Google anunció que dejará de venderle sus productos a Huawei en un contexto de fuerte rivalidad comercial entre Estados Unidos y China. La decisión se produce después de que el gobierno estadounidense de Donald Trump incluyera a la empresa china en una lista negra comercial. Pero como si eso fuera poco, ahora la "guerra comercial" se extiende a otras marcas de origen chino, como ZTE.

Primero Google suspendió los negocios con Huawei que requieran la transferencia de productos de hardware y software, excepto los cubiertos por licencias de código abierto, según señaló este domingo la agencia Reuters. Los usuarios seguirán teniendo acceso a la Play Store, pero no podrán actualizar el sistema operativo de sus terminales. Esta medida es consecuencia del veto por parte del presidente de Estados Unidos a aquellas empresas que supongan "una amenaza para la seguridad nacional".

Dicho país dio un término de 90 días en los que mantendrá el soporte de manera normal de parte de Google, informó el especialista Gustavo Talaván a Radio U.

La ruptura de las relaciones de Google con Huawei es la última consecuencia que ha tenido la particular guerra del gobierno americano contra la tecnología proveniente de China. La desconfianza respecto a Huawei y ZTE se remonta a 2012. Según un informe elaborado por un comité del Congreso de EE.UU., ambos fabricantes no aportaron documentación que demostrara su relación con el gobierno, lo que generaba una preocupación por presunto espionaje.

Huawei, que hoy es la segunda empresa con más ventas de teléfonos inteligentes, ya estaba trabajando en un sistema operativo propio para hacerle frente al veto norteamericano, según BBC Mundo. "Hemos preparado nuestro propio sistema operativo. Es nuestro plan B. Pero por supuesto que preferiríamos trabajar con los ecosistemas proporcionados por Google y Microsoft", dijo en marzo Richard Yu, uno de los directores ejecutivos.

Por lo tanto, con el objetivo de fortalecer la seguridad nacional, se elaboró una lista (Entiry List) de empresas y transacciones que suponen riesgos potenciales. Ninguna compañía americana puede hacer negocios con una empresa que figure en esa lista negra y Huawei está incluida en ella. Google ha suspendido sus negocios y, según informa Bloomberg, Intel, Qualcomm y otros grandes fabricantes de chips se unirán a este bloqueo, informó el portal Xataka.

En el caso de ZTE, le prohibió que comprara componentes de empresas americanas, incluyendo Qualcomm y Dolby. Eso obligó a ZTE a paralizar su actividad comercial a nivel mundial, aunque finalmente Trump decidió levantar el bloqueo a ZTE bajo unas condiciones que podrían verse alteradas con esta nueva orden ejecutiva.

Hasta el momento, y exceptuando a ZTE, ninguna de las otras marcas chinas ha sido incluida en el listado de empresas potencialmente peligrosas. Entre los motivos por los que no figuran en la "lista negra" están, por ejemplo, que no son fabricantes de equipos de red, que han aportado la documentación necesaria para acreditar qué tipo de relación mantienen con el gobierno chino o, simplemente, que no comercializan sus productos en EE.UU.

Xiaomi, según IDC y a fecha de 2018, se ha convertido en el cuarto fabricante de smartphones a nivel mundial por detrás de Samsung, Apple y Huawei, pero a diferencia de estos, no tiene presencia comercial en Estados Unidos. Tampoco se dedica a la instalación y mantenimiento de redes de comunicaciones, el sector más susceptible de sufrir espionaje, según el Gobierno de Trump. Ni Xiaomi ni las marcas pertenecientes al conglomerado BBK Electronics (OnePlus, OPPO y Vivo) se dedican a la fabricación, instalación y mantenimiento de equipamiento de red.

Las consecuencias del bloqueo tecnológico de Google a Huawei

El gigante informático y otras empresas tecnológicas dejarán de ofrecer sus aplicaciones a la popular marca china.

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La firma china no tendrá acceso a las nuevas versiones de Android ni a Gmail después de que Donald Trump, presidente de Estados Unidos, la incluyera en una lista negra comercial.