Una hora más de clases en las primarias: las posibilidades reales que tienen las provincias

Sociedad

Ahora bien, ¿qué se hizo en ese panorama y cuál es la situación actual de la educación secundaria de la provincia? Para dar respuesta a esta y otras preguntas, #ChatPolítico entrevistó a Emilio Moreno, director de Educación Secundaria de la Dirección General de Escuelas (DGE), que afirmó: “La pandemia visualizó algunos puntos que la normalidad no mostraba de la educación en general”.

“Lo que el Gobierno de la provincia hizo desde el primer momento de la pandemia fue trabajar para llevar la conectividad a cada rincón de Mendoza. Nuestros jóvenes fueron primordiales en ese contexto. Desde mucho antes del inicio de la cuarentena, el Gobierno se anticipó y activó el GEM, un sistema nominalizado que nos permite saber la situación de cada uno de los estudiantes. También se adecuó el sistema a las asistencias vía web, donde los profesores y directivos colocaban si el alumno estaba o no conectado, qué falencias tenía el alumno, si tenía dispositivo o no, entre otros; en sí, una cantidad de información que nosotros relevábamos mensualmente. Así se creó la Red de Apoyo a las Trayectorias Escolares (RATE), que nos permitió generar políticas acordes al momento”, explicó Moreno.

Para el funcionario, la crisis puso en evidencia las deficiencias del sistema, ya que la migración a la virtualidad en el sistema educativo puso de relieve las desigualdades entre las poblaciones de las zonas urbanas y las zonas rurales en términos de acceso.

“En pandemia, Mendoza no perdió ni un momento. Además del GEM, en zonas rurales se entregaron cuadernillos, se amplió la red de Internet para que las gente de zonas alejadas tuviera acceso, se entregaron equipos celulares para que los chicos pudieran recibir toda la información y material de estudio. Aquí, hay que remarcar que todo esto también se logró gracias al trabajo de directivos y docentes, que llevaban o recogían los cuadernillos a los distintos puestos para que ningún chico dejara de estudiar en un momento tal difícil como el de la pandemia. El logro y compromiso fue de ellos”, detalló.   

Por otra parte, un estudio de Unicef Argentina afirma que, desde diciembre de 2020, unos 450.000 estudiantes del secundario habían tenido una nula o insuficiente participación escolar, de los cuales 190.000 tuvieron nulo contacto con el colegio.

“En Mendoza, venimos ya con una transformación en materia educativa. En 2019, por ejemplo, realizamos cambios por los que se establecen proyectos integrados, prácticas áulicas y activas, entre otros. También cambiamos las instancias de mesas de exámenes de un día por el formato de recuperación de saberes.

Este es un formato realizado para chicos que tienen espacios pendientes de aprobación: se cambia ese instante por un mes completo con apoyo escolar y evaluación formativa y continua, lo que nos dio muy buenos resultados. Además, durante la pandemia y tras mucho diálogo con docentes y directivos, se cambiaron los cuatrimestres por un periodo único para dar paso a las evaluaciones antes mencionadas. Con la normalidad, esto continúa, pero con dos informes: uno en julio y en otro en fines de noviembre”, completó.