Así como los huracanes se nombran, cada viento zonda se categoriza. Aunque muy pocos lo sepan, la intensidad de las ráfagas determina una clasificación para los meteorólogos, que también servirá para los distintos estudios que llegan a Defensa Civil al momento de analizar los riesgos a los que se expone la sociedad según la situación climática.

Si bien es un fenómeno frecuente en la provincia, la falta de un antecedente reciente se vivió con cierta preocupación durante la tarde del miércoles 4. En este caso, los mendocinos comenzaron a preguntarse qué tan fuerte había sido el viento de ayer, en especial desde temprano, cuando los padres se quejaron porque hubo clases pese a que ya se sentía un viento cálido en altura.

El Programa de Meteorología del Ianigla-Conicet, que funciona desde 1991, detectó que en San Martín, San Rafael y Malargüe, es decir, aquellas zonas donde más se sintió el embate del aire seco desde el Pacífico, las ráfagas alcanzaron los 80 kilómetros por hora. ¿Qué significa?

El meteorólogo Federico Otero dijo que, con base en un rango de cuatro categorías, el viento zonda de este miércoles alcanzó categoría Z2, es decir “severo” porque no superó los 90 km/h.

Fuente: Programa Regional de Metereología IANIGLA - CONICET

Durante la tarde, en los chats de los grupos de padres mendocinos se encontraban preguntas del tipo “¿Por qué los meteorólogos avisaron de este zonda con tanta anticipación y otras veces no?”. Los especialistas explicaron que no se trata de predicciones, sino que son pronósticos y, como tales, son probabilidades de que un fenómeno se produzca (o no). Los meteorólogos no saben cómo se va a comportar la atmósfera, pero sí pueden detectar indicios, señales, anomalías, muchas veces, en base a estadísticas y mediciones previas.

El viento zonda de este miércoles 4 se avisó con más de 72 horas de anticipación debido a la intensidad y a la duración (20 horas) que ya se preveía en los esquemas meteorológicos. Sin embargo, en la mayoría de los casos sólo se puede saber con unas seis horas de anticipación “con precisión”, aclaró Otero.

“¿Y el frente frío?”. Es que este jueves, después de una madrugada agitada con zonda, muchos esperaban un marcado descenso de temperatura y nubosidad, pero el panorama fue el contrario: la mínima fue de 12° C (habitual para la fecha) y la máxima se estimaba en 28° C. Para el meteorólogo del Ianigla, la probabilidad de la entrada del frente frío es una constante, pero no siempre es tan marcada. “En nueve de cada diez casos, el frío es intenso, nuevamente todo se basa en las estadísticas y puede darse algo diferente”, cerró la charla.