El femicidio de Julieta González (21) fue un hecho que conmovió a la provincia. La mujer fue encontrada en un descampado de Cacheuta y el principal sospechoso es el hijo del dueño de la empresa de transporte Mitre, Andrés Di Césare (23). A dos días de la audiencia que analizará el pedido de prisión domiciliaria hecho por la defensa, los abogados de la querella denunciaron al juez del sexto Juzgado de Garantías, Gustavo Mangiafico, por incumplimiento de funciones como funcionario público.

El cuerpo hallado en Cacheuta es de Julieta González

La abogada querellante Carolina Jacky señaló a Unidiversidad que se trata de dos presentaciones distintas. Por una parte, la denuncia penal que realizó la madre de la víctima, Susana González, con asesoramiento de Mario Lúquez. La segunda es una denuncia administrativa en la Suprema Corte de Justicia, a cargo del abogado Juan Ruffo.

Entre los argumentos, la letrada señaló que los abogados del acusado realizaron presentaciones de las que la querella no fue notificada. De esta manera, se violó la Ley contra la  Violencia de Género, que establece que la víctima tiene derecho a ser informada permanentemente sobre la situación procesal del agresor, así como sobre el alcance y vigencia de las medidas cautelares adoptadas. De acuerdo a lo que establece el texto, la víctima también deberá ser informada en todo momento de la situación penitenciaria del victimario.

Jacky señaló que por este proceso pidieron la recusación del Juez, es decir, se le pidió a Mangiafico que se apartara de la causa y por ende, el magistrado debió no tener contacto con el expediente. El titual del Sexto Juzgado tenía tiempo hasta el viernes 17 para responder si aceptaba o no el pedido de la querella, pero decidió prorrogar su decisión al lunes 20, día que se realizará la audiencia.

Para la abogada, conocida por su defensa en casos de violencia de género, el magistrado cometió un error al no resolver la recusación en los cinco días hábiles que ordena la Justicia. La siguiente instancia dependerá de los siempre criticados tiempos de la justicia. Es que el expediente por la muerte de Julieta ahora se encuentra en manos de la fiscal de Homicidios Claudia Ríos y, luego de la presentación de la querella, el documento deberá enviarse a la Unidad Fiscal de Capital, lugar donde la madre de la joven radicó la denuncia.

Si el documento llega a la Unidad Fiscal, la audiencia pactada para el lunes 20 a las 10 de la mañana será considerada nula. “El juez de Garantías actuó como si la víctima no existiera. La defensa pensaba descartar los ADN del auto del joven, y la declaración que el victimario hizo a un policía sobre que él la había matado y que estaba embarazada. Esto pretendía eliminar la defensa”, recriminó Jacky, al tiempo que adelantó que el accionar del magistrado puede traerle graves problemas.

El caso

Julieta González salió de su casa de calle Pescara de Maipú la tarde del miércoles 21 de septiembre de 2016. Horas antes, la mujer fue a visitar a su madre, que se desempeña como policía, a la Comisaría N.º 10, y tenía pensado reunirse con alguien aquella noche. Después de ese día nadie supo nada más de ella.

El cuerpo de la mujer fue hallado el 27 de septiembre en las cercanías del penal Almafuerte, atado de pies y manos y con golpes en la cabeza. Uno días antes, el 22, una persona encontró en las inmediaciones de la destilería de Luján de Cuyo una campera y un documento de identidad que más tarde confirmaron que pertenecían a Julieta.

Por el hecho hay un imputado. Se trata de Andrés Di Césare, quien tuvo comunicación telefónica con la víctima el día que desapareció e inclusó confesó a la policía que la había matado. 

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