La derrota de Godoy Cruz Antonio Tomba frente a River Plate por 2 a 1 dejó varios puntos para analizar. Ante la falta de volantes en el Bodeguero, Lucas Bernardi decidió probar con el "Cebolla" Olivares como “5” natural, aunque retrasándose considerablemente para estar cerca de Viera y Ortiz.

Bernardi era consciente del riesgo que corría, y más aun conociendo las dimensiones del rival de turno. Sin embargo, ante la ausencia de Henríquez (expulsado) y Serrano (lesionado), el DT se volcó por el defensor, teniendo también la opción de colocar a Maxi Correa en esa posición.

Luego del partido, Olivares hizo referencia a su lugar en el once inicial: “Me sentí cómodo, mis compañeros me hablaron bastante, era una posición poco habitual, así que dentro de todo me sentí bien”.

La realidad fue distinta a lo referido por el jugador, ya que naufragaba por la hebilla del campo de juego, sin poder detener a Leo Ponzio y Nacho Fernández. Además, el Cebolla no contó con la colaboración de Garro -que jugó por el sector izquierdo, también poco habitual- y el Cuca Sánchez, de flojísimo partido. El ingreso en el complemento de Marcelo  Benítez tampoco permitió una mejoría en dicho sector de juego.

En cuanto al análisis global, el jugador del Tomba manifestó su bronca por la resolución del partido: “Se nos escapa al final por una pelota parada. Estamos calientes. Habíamos hablado de que no podían ganarnos de vuelta en la pelota parada. Nos enfrentábamos al mejor equipo del fútbol argentino. Le jugamos de igual a igual, le intentamos cerrar todos los espacios, teníamos el partido controlado. Tuvimos nuestras oportunidades como ellos también las suyas, sabíamos los riesgos que podíamos tener con River”.

Finalizando, Olivares dejó en claro lo próximo a realizar: “Hay que cambiar el chip rápido, trabajar y corregir los errores que venimos cometiendo”.

Escuchá a continuación a Sebastián Olivares.