Autoridades brasileros informaron sobre un violento enfrentamiento entre bandas criminales en la prisión de Manaos, en el estado brasileño de Amazonía, que comenzó ayer 1 de enero por la tarde. Estiman que hay 50 muertos. Al menos una decena de presos fueron degollados y algunos cuerpos fueron quemados y mutilados.

La Orden de los Abogados de Brasil (OAB) fue el colegio profesional que participó de las negociaciones para poner fin al motín. Según informó el portal de noticias Infobae, el organismo confirmó que la rebelión surgió por un enfrentamiento entre dos facciones criminales rivales. 

El virulento hecho comenzó en la tarde del domingo 1º de enero y la mañana de hoy, lunes 2, se dio por terminada la finalización. Epitácio Almeida, presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la OAB en Amazonía, quien coordinó las negociaciones con los presos y trabajó por la liberación de los rehenes que fueron liberados esta mañana, aseguró que fue "la mayor y más horrible masacre" en las prisiones de Brasil.

La OAB indicó que hubo muchas decapitaciones y algunos cuerpos fueron quemados y mutilados. Las muertes se produjeron tras un enfrentamiento entre el Primer Comando de la Capital (PCC), asentado en San Pablo, y la Familia do Norte (FDN), que domina las cárceles del estado de Amazonía y es aliado del poderoso Comando Vermelho (CV), una mafia con base en Río de Janeiro.

En tanto, Sergio Fontes, secretario de Seguridad Pública de Amazonía, supone según los indicios que fue un ataque de una facción mayor contra una menor para eliminar la competencia.

Decenas de personas han acudido a la puerta de la prisión para conseguir información de sus familiares presos.