La pandemia generada por la COVID-19 tiene un impacto negativo en cuanto al empleo de los jóvenes de todo el mundo. Según un informe presentado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), 1 de cada 6 jóvenes se ha quedado sin empleo desde el inicio de la pandemia. Asimismo, el incremento rápido y sustancial del desempleo juvenil registrado a partir de febrero afecta más a las mujeres que a los hombres. Estas tendencias también fueron revalidadas por el Indec en el informe de Mercado de Trabajo para el primer trimestre del año.

Para entender este escenario y ver qué depara el futuro a corto y mediano plazo, desde Unidiversidad buscamos testimonios de los trabajadores activos de esta franja: los millennials. También consultamos a especialistas de la UNCUYO que conocen los datos provinciales.

Como adelantamos, el informe del Observatorio de la OIT "La Covid-19 y el mundo del trabajo" precisa que los jóvenes están siendo afectados de manera desproporcionada por la pandemia y que el ágil incremento del desempleo juvenil registrado a partir de febrero de este año afecta con más dureza a las mujeres que a los hombres.

María tiene 26 años y trabaja en el área de comunicación en una organización pública. Aseguró que no ha perdido su empleo, pero sus tareas se han incrementado en cantidad durante esta cuarentena: “Percibo el mismo sueldo de siempre, pero hago el 30 % más de tareas que antes del aislamiento social, preventivo y obligatorio, sumado a que hubo que virtualizar las cosas y trabajar desde plataformas, y a muchos compañeros se les dificultó esta modalidad por no saber cómo proceder”.

La joven agregó que la línea entre la vida laboral y la vida privada se ha desdibujado totalmente, ya que los trabajos o las llamadas laborales se extienden hasta los fines de semana o feriados.

La incertidumbre sobre el futuro incierto del mercado laboral en los jóvenes se manifiesta de múltiples maneras. En el caso de María, ha tenido que buscar alternativas de trabajo como community manager, en las que le ofrecen un pago inferior al 50 % de la labor promedio. Sin dudas, un panorama preocupante.

El informe de la OIT arrojó, además, la estimación en reducción de horas de trabajo de 2020 respecto de 2019. El cálculo indica que que se perdió el 4,8 % de las horas de trabajo durante el primer trimestre del año. 

Por otra parte, Unidiversidad habló con Franco, que estudia para ser veterinario y trabaja realizando peluquerías caninas en una veterinaria de Godoy Cruz. Aseguró que desde su percepción personal, durante la pandemia, la cantidad de gente que asiste al local ha disminuido considerablemente. “La pandemia impacta negativamente en los trabajos de todos por el tema de las restricciones por día y básicamente porque hay menos gente en la calle. No tengo un sueldo fijo y dependo del flujo de gente para cobrar”, sostuvo.

Por su parte, Carla, docente de nivel inicial que ejerce en un colegio privado de Mendoza, dio su punto de vista. “En mi caso, la actividad se vio afectada porque tuvimos que adaptarnos a dar clases en contexto de distancia, pero conozco amigas que están sin trabajo porque ejercían licencias que se terminaron y con el tema de la cuarentena no están haciendo nuevos llamados docentes. Todo esto, sin mencionar que muchos colegios o salas han cerrado. En mi caso, cuento con tecnología y he podido hacerle frente a la situación, pero otras colegas han tenido que contratar servicios de internet que no estaban contemplados en sus gastos”, aseguró.

Trabajo ideal

Ante la propuesta de pensar en un trabajo ideal, los jóvenes consultados coincidieron en que añoran la implementación de un horario fijo con un sueldo fijo. Curiosamente, el deseo va a contramano del estereotipo de lo que se entiende por joven millennial, catalogado siempre como desestructurado, que privilegia sus prioridades individuales. 

Franco hizo hincapié en la importancia de establecer un monto fijo de ganancia, aunque sea mínima, para poder garantizar cierta seguridad económica. Además, destacó la importancia de contar con un contrato laboral que avale días por enfermedad, licencias y vacaciones.

Por su parte, María subrayó pertinente que en su ámbito laboral se respete la jornada laboral establecida para los periodistas (6 horas), cubriendo un básico con base en la experiencia o antigüedad, más beneficios a la salud, como una obra social. “Ideal me parecería trabajar en un lugar libre de violencia laboral, acceso a nuevas tecnologías y con perspectiva de género, en lo posible”, agregó.

La UNCUYO presentó el Informe Laboral 2019

Unidiversidad dialogó con María Albina Pol, coordinadora del Área de Estudios Regionales del Observatorio Laboral del Instituto de Trabajo y Producción (ITP), que publicó hace unos días el Informe Laboral 2019, que analiza el panorama laboral tanto mundial como nacional, pero centrado en la provincia de Mendoza. El documento arrojó que el mercado de trabajo argentino y provincial durante el año pasado se ha visto fuertemente deteriorado y afectado frente a la crisis económica.

“Se puede notar que, a partir de la pérdida de poder adquisitivo de los salarios y el contexto de crisis, aparece una mayor demanda de puestos de trabajo. De esta forma, aumenta la tasa de desempleo, es decir que la mayoría de los que buscaron trabajo no lo consiguieron. En Mendoza, durante el 2019 se registró un desempleo del 8 %, 3 puntos porcentuales más respecto del 2018”, explicó Pol.

Además, Pol destacó que aumentó el trabajo no registrado: "Aumentó la tasa de informalidad, que en la provincia se mantenido en torno al 39 % del total de ocupados. La gran mayoría de las personas ejerciendo este tipo de trabajos son mujeres”, agregó.

Cómo fue la situación del mercado laboral de Mendoza en 2019

Desde el Área de Estudios Regionales del Instituto de Trabajo y Producción (ITP) de la UNCUYO se dio a conocer el Informe 2019 del Observatorio Laboral. El documento analiza la realidad del mundo del trabajo en el territorio provincial durante el 2019, considerando el panorama regional y nacional.

Escenario “post pandemia”

“Me cuesta mucho pensar en una post pandemia porque no sé cuándo va a ser, pero podemos imaginar que nos vamos a enfrentar a muchos desafíos en términos de recomposición de la sociedad en general, de la economía y del mercado de trabajo. Entendiendo que el mercado laboral es un mecanismo de inclusión social y, con este tema de la pérdida de los puestos de trabajo y del poder adquisitivo, estamos pensando que supone cierta exclusión social”, opinó Pol.

También hizo hincapié en el modo de aplicación de los mecanismos de contención del Estado, como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) o el Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP), los cuales, afirmó, que deberán sostenerse por un tiempo para evitar procesos de exclusión social.

El mercado laboral para los centennials

Frente al contexto actual y las complicaciones que se presentan para los millennials, tanto Franco como Carla y María consideran el panorama muy arduo debido a que el mercado laboral ha arrastrado problemas y desigualdades desde hace años. “Hace 10 años trabajo y creo que la situación para la nueva generación se viene difícil. Por lo general, en los trabajos te piden experiencia, y si no tenés experiencia, te exigen demasiado”, afirmó el joven estudiante de Veterinaria.

Por su parte, Carla asume que muchos empleadores posiblemente quieran aprovecharse de estas generaciones, ya sea por su inexperiencia o por su inocencia. De este modo, destacó la importancia de estudiar y perfeccionarse todo el tiempo para evitar todo tipo de abusos laborales.

“Yo creo que lo que nos ha pasado a los millennials, y que quizá les pase a los centennials, es que nos hemos encontrado con un mercado laboral basado prácticamente en una mentalidad fordista. En mi caso, mi profesión se trata de lo ‘blando’ o lo creativo; entonces, si el jefe no considera que un proceso creativo es valioso, nos vamos a chocar contra un paredón. De aquí surgen los picos de estrés o el síndrome de burnout, por lo que es importante reestructurar el mercado laboral. Si a los millennials nos fue mal, a los centennials lamentablemente les va a ir peor”, concluyó la joven comunicadora.