Todas las personas que crecimos con internet tenemos una vaga noción de lo que es la deep web, con cierta fascinación morbosa, basados en historias que leímos en foros o que oímos en alguna charla que mantuvimos, pero también con mucho desconocimiento. La realidad es que la parte “oculta” de internet está más al alcance de nuestros teclados de lo que pensábamos. La deep web –o internet profunda, de acuerdo a la traducción– es una cosa; la dark web es otra. En esta última sí circula material ilegal y sumamente dañino, que va desde el narcomenudeo hasta la pornografía infantil y la oferta de todo tipo de servicios. Para entender la diferencia entre lo deep y lo dark, Unidiversidad consultó a especialistas en seguridad informática.

Lo primero que hay que decir es que la deep web no es inherentemente mala. La deep web es “todo lo que no vemos”. Cristian Borghello, licenciado en Sistemas y capacitado en seguridad de la información, la define como “contenido que está en internet, pero que no está fácilmente accesible, que no está indexado de forma general por un buscador como puede ser Google, Bing o Yahoo”.

El ejemplo que Borghello ofrece es bastante esclarecedor: “Cuando a vos te mandan un correo electrónico y adentro hay una imagen o documento, eso lo podés ver solamente vos. Ese contenido está en internet, pero si yo quiero acceder a él, obviamente no voy a poder porque no tengo autorización. Algo tan sencillo como eso es parte de la deep web”.

¿Quién está en la oscuridad de internet?

¿Qué pasa cada vez que ingresamos a internet? ¿Existen personas dedicadas exclusivamente a robar información de correos y redes sociales? ¿Son ciertas las leyendas que relatan la existencia de zonas oscuras dentro de la web donde se puede comprar órganos, comprar drogas para recibirlas en nuestro domicilio o ver online la tortura de una persona?

Dark web: estafadores, narcos y pederastas a la orden del día

Dentro del universo de lo oculto, hay una capa, pequeña en comparación, que se denomina dark web. No tiene una diferencia técnica con la deep web, sino más bien ética. “Dark viene justamente de oscuro —explica Borghello—. Ese contenido es parte de la deep web, es decir que no es tan accesible para cualquiera, pero adicionalmente requiere algún tipo de herramienta particular (navegadores como Tor) para acceder a él. Además, ese contenido suele ser algún tipo de material dañino”. 

La investigadora y docente de la Licenciatura en Ciencias de la Computación en la UNCUYO María José Erquiaga corrobora: “Dark web es un concepto. Es una parte de la deep web donde se mueven las cosas ilegales, como drogas, pornografía, tráfico, entre otras. Técnicamente hablando, son lo mismo, es decir, todo lo que no está indexado por los buscadores tradicionales, solo que en la dark web se le da usos ilícitos”.

Para Borghello, que también es consultor en Seguridad de la Información y dicta conferencias sobre esta temática, toda tecnología es “agnóstica”, una herramienta en manos de quien la usa, y este último tiene el poder y la voluntad de hacer un buen o mal uso.

Desmitificando ideas: sobre la "deep web" y el delito virtual

Tecnología Columnas por Federico Aragona para Télam / Publicado el 04 DE JUNIO 2019 Internet borra distancias, tiende puentes y facilita la vida diaria, tanto que hoy no somos capaces de imaginar el mundo sin esta poderosa herramienta.

La otra cara de la internet profunda: contrainformación y otras prácticas de resistencia

Esta capa oculta debajo de la superficie que todos conocemos de la red fue hecha para otorgar anonimato. Esta característica es la que la hace propicia para que, por ejemplo, periodistas que trabajan en lugares en los que el derecho a la libertad de expresión es violado reiteradamente puedan apropiarse de la herramienta y usarla para informar. Muchos de ellos arriesgan su vida al ejercer su trabajo, y la deep web les da más seguridad. Además, se ha empleado este arma en la organización de movimientos populares: “Se usó mucho en la Primavera Árabe y ahora en las marchas de Hong Kong también se está utilizando”, subrayó Borghello.

Poniendo el foco en el lado más positivo del anonimato en línea, Erquiaga sostuvo que “la deep web se puede explorar teniendo en cuenta los riesgos y tomando precauciones, porque hay información diversa y diferente. Hay que tener un conocimiento para navegar y saber con qué fin se accede”, concluyó la investigadora de la Facultad de Ingeniería.

El lado oscuro de la red

Seguimos con el mes del terror y hablamos de algo que asusta a más de uno: la dark web. Es ese lugar desconocido de Internet en el que coexisten el tráfico ilegal de drogas y armas, la violencia explícita, el morbo, archivos confidenciales, sicarios ...