La posibilidad de replicar en la realidad objetos diseñados digitalmente no sólo ha revolucionado a la industria y la medicina sino que abre las puertas a la aplicación de estas tecnologías en campos muy variados.
 

Impresoras 3D de comida

La empresa española Natural Machines creó un dispositivo 3D capaz de “imprimir comida” que utiliza ingredientes frescos en forma de puré para producir todo tipo de recetas. “Foodini” tiene conectividad a Internet para poder seleccionar recetas preferidas y compartirlas en redes sociales o para gestionar el aparato desde los dispositivos móviles. Hay quienes creen que las impresoras de alimentos en 3D sustituirán al microondas en los próximos años.
 

Moda

Con estas máquinas es posible hacer ropa a la medida. Después de que el diseñador ha hecho su propuesta en la computadora se pueden imprimir los tejidos utilizando filamentos plásticos como el PLA. Si bien los primeros tejidos eran un poco estáticos debido a la materia prima utilizada, se están logrando prendas más desarrolladas, similares al crochet.

También se está experimentando con esta tecnología para imprimir ropa con tejidos de tela. La impresora 3D Electroloom realiza la impresión de prendas con fibras de poliéster y algodón. En este caso, las fibras se encuentran en estado líquido y se vierten directamente sobre un molde, el cual se diseña con un programa CAD y se imprime en 3D o recorta con métodos tradicionales. Si bien los resultados no son los mismos que con los métodos de fabricación tradicionales, abre muchas posibilidades de innovación en la industria textil.
 

Casas

Utilizando impresoras 3D gigantes se ha logrado construir edificios y casas, lo que promete revolucionar el área de la construcción. Con esta tecnología se prevé reducir los costos de transporte a cero y evitar la generación de residuos, ya que todo puede ser reciclado. El material utilizado es un plástico de origen vegetal.

El mecanismo es idéntico al de las impresoras 3D a pequeña escala: se elaboran las coordenadas y el diseño en la computadora; luego se envía a la máquina, que en "capas" tridimensionales reproduce la información. Sólo debe trasladarse la impresora 3D al lugar de la construcción.
 

Impresoras autorreplicantes

En la actualidad ya se trabaja con impresoras 3D que pueden imprimir, a su vez, casi todos los componentes para construir otras impresoras 3D. Esto resulta un avance fundamental, pensando en el uso pedagógico de estas tecnologías, ya que se podrían fabricar de forma accesible y barata este tipo de máquinas para ser utilizada en instituciones educativas. Se prevé que de esta forma cada estudiante no sólo tendrá la posibilidad de aprender la utilización de los software de diseño CAD, sino que además tendrán su propia impresora realizar objetos y proyectos.
 

¿Impresoras 4D?

Se está experimentando con la creación de objetos inteligentes utilizando una impresora 3D tradicional. La novedad está en el material con que se imprime. Científicos lograron formular un material sintético capaz de ser programado para cambiar de forma al tomar contacto con el agua.

Estas son algunas aplicaciones posibles para la tecnología de impresión 3D. Se prevé que en tiempos no muy lejanos cada casa pueda contar con este artefacto de la misma manera con que se cuenta con una computadora. Las personas podrían fabricar cualquier tipo de objetos, tanto diseñados por ellos mismos como aquellos de código abierto, en sitios web donde ya muchas personas suben sus creaciones y son factibles de descargar de manera gratuita.

Esto plantea muchos interrogantes a futuro. No sólo se puede fabricar comida o indumentaria con esta tecnología. Ya hubo experimentos sobre fabricación de armas de fuego con materiales plásticos y creados a partir de impresoras 3D. Esto abre el debate sobre la regulación y los límites legales que podrían afectar a estas tecnologías, ya que estos artefactos tienen la posibilidad de crear cualquier tipo de objetos.