La pequeña ciudad polaca de Swiebodzin no es conocida en el mundo por sus verdes praderas ni por su buen emplazamiento dentro de su región: lo es por la estatua de Cristo Rey que corona una de sus colinas. Con 36 metros de altura, es la imagen más alta del mundo de Jesucristo.

Sí, incluso supera el Cristo Redentor de Río de Janeiro, que mide 30 metros, y también al Cristo de la Concordia de Cochabamba, en Bolivia, que suma 34 metros sin contar el pedestal. Aún así, el Cristo de Swiebodzin es menos conocido, si bien recientemente ha captado varias portadas en la prensa polaca.

La razón: unas antenas que han sido instaladas en su cabeza y que, pese a estar semiocultas por la corona que lleva la estatua, se han descubierto hace poco gracias a un vídeo grabado con un dron. Esto sirvió para que el tabloide local Fakt24 la emprendiera contra la parroquia de Swiebodzin y para que algunos criticaran el alquiler del Cristo para estos fines.

La estatua, que alcanza los 52 metros de altura gracias a la elevación de la colina sobre la que está situada, es un lugar idóneo para transmitir cobertura para la región. Sin embargo, no parece que esto sea así. Al margen de lo publicado por la prensa, según SpeedTest.pl, una web que mide la velocidad de distintos puntos de propagación de redes móviles, lo es cierto es que el Cristo no se emplea como antena de señales móviles.

No parece siquiera que la parroquia de Swiebodzin esté al tanto de la existencia o el uso de dichas antenas, pues el propio párroco reconoció a Money.pl que sólo tenía constancia de la instalación de un pararrayos en la cabeza del Cristo, nada de antenas para emitir Internet.

Esto choca con la información de Fakt24, que asegura que todo fue idea de un párroco, que contactó con un proveedor de Internet (la fuente del tabloide) porque quería tener Internet para monitorizar lo que ocurría en la parroquia y, de paso, enviar señal a otros clientes.

Sea como fuere, por lo que se aprecia en las fotografías de la cabeza de la estatua, lo que en realidad hay instalado en la coronilla de la estatua son antenas reflectoras de señales, no emisores en sí, que podrían utilizarse para transmitir o amplificar señales wifi de larga distancia o WiMAX.