En una suerte de programa homenaje al formato, esta edición de Vieja Nueva Escuela se viene con dos DJ sets que usan el vinilo como soporte, el primero de ellos a cargo del invitado Ringo Obregón, que selecciona los lados B de varios grupos de rock y pop de los 80, y el segundo a cargo del anfitrión DJ Uter, que bucea en los sonidos de la misma época, pero por el lado del hip hop y el electro.

Periodista y hombre de radio, además de docente y un constante indagador de música de todas las épocas, Ringo es uno de los impulsores del Club del Vinilo Mendoza, grupo de coleccionistas que se junta periódicamente para intercambiar, comprar, vender y disfrutar de los vinilos a través de sets de DJ invitados en distintos bares de la ciudad de Mendoza. Además es convocado a ciclos, ferias y demás eventos a compartir sus sesiones en doce pulgadas que habitualmente recurren al hit o a los clásicos. Para el mixtape que grabó especialmente para el programa, eligió el material menos conocido de artistas de renombre como New Order, Siouxsie and the Banshees y Human League.

Por el lado de Uter, su set es en realidad la primera parte de una sesión que presentó un panorama del hip hop iniciático, más cercano al breakdance y a la pista de baile que a las calles, con algunas gemas de nombres fundacionales del género como Afrika Bambaataa, Grandmaster Melle Mel y The Treacherous Three. Rimas y sonidos que suenan claramente fuera de época en un playlist actual pero que son la semilla inicial de todo un movimiento. Es que, en su propósito de conectar el pasado con el futuro, Vieja Nueva Escuela apuesta a buscar en la raíz para crecer y avanzar, haciendo hincapié siempre a la novedad.

En ese sentido, hay un primer bloque dedicado al Nu Jazz londinense, una escena que ha dado grandes nombres, como Shabaka Hutchins, del cual suenan sus proyectos Sons Of Kemet y The Comet is Coming, así como el pianista, productor y rapero Alfa Mist o el dúo de prodigios Blue Lab Beats, todas nuevas voces de una generación que asume su legado cultural, pero se anima también a nuevos desafíos sonoros.

Por el lado de la música electrónica, esa tendencia está representada por la fusión de géneros de los global club beats, cruzando el mundo digital con las improntas ancestrales de los folklores del mundo, con una rama orgánica cercana al folklore que busca introspección y reconexión con la madre naturaleza y otra de corte más bailable, que también recurre a las raíces africanas en las que la percusión lleva la voz cantante, pero inyectándole bajos y grooves propios de la discoteca.

Suenan novedades de Fértil Discos y Devagar Discos, dos sellos locales amigos, así como del polaco Basy Tropilkane y del australiano Wile Out, también discográficas habituales colaboradores del podcast. Finalmente, una mención especial a la obra de Nidia, de Principe Discos, una de las figuras más interesantes en surgir de la escena portuguesa, con algunos remixes de su autoría.

Una emisión de esas que van y vienen en la historia, los continentes y los colores de la música, y que encuentran siempre el punto en común que los hilvane, desde el formato, la selección o la mera coincidencia.