Cuando el calvario es nuestro pueblo

Una denuncia pública de una víctima de violencia género disparó la necesaria consulta al área oficial. Cómo reaccionaron las personas en los distintos ámbitos.

Cuando el calvario es nuestro pueblo

Captura del posteo en Facebook

Sociedad

Violencia de género

Unidiversidad

Unidiversidad/ Sabrina Villegas Musri

Publicado el 01 DE FEBRERO DE 2018

“Cuando él dijo '¡Salud!' como agasajo a las reinas, yo dije que no lo aplaudieran porque es un golpeador, aunque les cante a las mujeres. Lo que yo quise fue que no lo aplaudieran; no que le pegaran ni que lo bajaran”. Así describió Cintia lo que pasó el viernes 26 de enero en plena peatonal de Rivadavia. El escrachado en plena vía pública con un cartel que decía "Golpeador falopa" era Maximiliano, su expareja y padre de su hija.

El episodio  fue registrado por un observador desconocido por la denunciante. El hombre la grabó y luego subió el video en las redes sociales a modo de rechazo a la actitud de la joven. Hoy el posteo cuenta con más de 140 mil reproducciones, 1589 reacciones, más de 3000 compartidos y más de 400 comentarios. Es decir, tuvo un efecto contrario al deseado por el usuario.

Cintia es aficionada a la fotografía y trabajaba en el evento de las reinas distritales de la Vendimia antes de la elección departamental. Maximiliano trabajaba como cantante en el mismo evento.

Ella estaba contratada por una de las 13 comisiones distritales que se ocupaban de promocionar a su representante vendimial. Él había sido contratado por el municipio. Ambos habían tenido una fuerte discusión el 14 de enero. Luego, ella puso la denuncia policial y él debió cumplir una orden de restricción de acercamiento. Pero la medida se diluyó cuando compartieron el mismo espacio en el ámbito de los festejos vendimiales.

“Cuando lo vi estaba sola, fui a decirles a los organizadores que se tenía que ir porque tenía una orden de restricción. Se rieron y me dijeron: 'No, el problema es tuyo, solucionalo como puedas'. No sólo que no se fue, sino que cada vez que yo me arrimaba a la chica a sacarle fotos, él me murmuraba cosas como: 'No servís pa’ bosta'. Yo hacía oído sordo, porque debía quedarme hasta que la chica se retirara”.

 

El ataque del 14 de enero

Pasaron 12 días de la fuerte discusión que terminó en denuncia contra Maximiliano. Cintia se mostró ante todas las personas presentes con un cartel con las palabras despectivas hacia su expareja. Su reclamo pedía que no aplaudieran al cantante, aunque pocos le prestaron atención en ese momento.“Me sentí mal, yo estaba muy descompuesta. Temblaba de los nervios. Supongo que él está haciendo su vida normal. Yo ahora debo andar acompañada por la calle. Si me pasa algo ¿quién cuida a mi bebé?”, se pregunta la  joven rivadaviense.

Había vecinos el día que soportó la agresión física: “Iba pasando un vecino que le pegó un grito mientras él golpeaba cosas con un caño de la pileta y me gritaba. Vino otro vecino y ahí se fue. Inmediatamente llamé al 911 y vino un móvil. Yo estaba en estado de shock, mi hija también. Llamé a unos amigos para que se quedaran en casa mientras hacía la denuncia”. 

La joven comentó a Unidiversidad su situación dentro de la comisaría: “Demoraron muchísimo en atenderme. Estuve desde las 15 y me atendieron recién a las 19 para tomarme la denuncia. No supieron decirme si él violó la orden de restricción porque no saben si lo han notificado, aunque viva a media cuadra de la fiscalía. Responden que no hay móviles, aunque puedan ir caminando, o que no lo han encontrado  porque trabaja en comercio. Dicen que si no le ha llegado la notificación esto se cae porque no está violando nada”, contó.

 

Qué hacer

Silvina Anfuso, directora de Género y Diversidad, comentó los pasos que debe seguir una mujer que es violentada por su pareja: “Cada caso es particular, lo que debe hacer es informarse de sus derechos y pedir protección. La línea 144 y áreas de la mujer dan información y ayudan a armar una estrategia para cada caso particular. Los juzgados son los que otorgan las medidas para proteger a las mujeres, pero si el accionar del agresor es un delito (amenazas de muerte, lesiones, privación de la libertad, etc.), va a actuar la Justicia mediante las fiscalías para investigar y castigar el delito cometido por el agresor. Es importante mencionar que, en caso de emergencia, hay que llamar al 911. La 144 es una línea de asesoramiento y acompañamiento. La 911 es para cuando ocurrió un delito y se necesita en ese momento un móvil policial".

La responsable del área explicó cómo se puede ayudar a un menor que presencia un acto de violencia contra su madre: “Si el niño pide ayuda, existen áreas de niñez en municipios y Provincia para que sea escuchado. También en los juzgados de familia”.

Sin embargo, Cintia sostiene que: "A mi hija de dos años no le dieron asistencia psicológica. Anda nerviosa, se asusta cuando se cierran las puertas por el viento. Escucha golpes y se larga a llorar. Al regresar de la casa de mi mamá no quería volver a entrar a nuestra casa. Tiene algunos daños ella, pero no sabe cómo expresarlos y yo tampoco sé cómo ayudarla”.

En el momento de presentar las capturas de pantalla de las amenazas por Whatsapp y mensajes al celular, la rivadaviense tampoco recibe interés de los integrantes de la fiscalía: "Me dijeron que lo bloqueara. No me lo tomaban porque los chats son de hace un mes y medio atrás. Les dije: 'Tengo un montón de mensajes'. Me dijeron: 'Bloquealo y listo'". Unidiversidad investigó cómo reaccionar si la policía no quiere sumar a la denuncia la violencia por las redes sociales: “En nuestra provincia existen fiscalías especializadas, como la de género o la de delitos cibernéticos”.

 

Mirá cómo podés denunciar delitos con el nuevo sistema de fiscalías

Procuración General de Mendoza eliminó la distribución de unidades fiscales por departamento para que sea por especialidad. La población seguirá realizando las denuncias de la misma manera: en comisarías o vía Internet.

Luego de bajar el cartel, Cintia fue a hablar con el intendente de Rivadavia: "Me dio vuelta la cara. Solo me contestó una mujer que estaba a su lado y dijo que no era forma de protestar". Pero ¿qué debe hacer la víctima ante casos de negligencia política? Anfuso explicó: "Siempre se acude al órgano superior u otros poderes que ejercen el control sobre el que está siendo cuestionado. Pueden pedir acompañamiento de especialistas y/o reparticiones abocadas a las temáticas de género".

 

Zona de violencia intrínsica

Tras la repercusión han aparecido nuevos casos de violencia en la zona Este, cuenta Cintia: “Una chica me escribió diciendo que a ella también la había golpeado el marido y que ella volvió, que solo está con él por los niños. Muchas mujeres me han escrito que han pasado por la misma situación, pero ya se han podido despegar de ello. Algunos pocos decían que yo era una despechada por escribir el cartel”.

Cintia aconsejó a las mujeres que atraviesan situaciones de violencia “que pidan ayuda y que no se callen". "Muchos me han dicho: eso se soluciona puertas adentro. ¡Pero puertas adentro no encontrás solución porque estás con un violento! ¿A quién le vas a pedir ayuda? ¿A él? No. Se tiene que hablar, se tiene que ir a la justicia. Por ahí los tiempos de la justicia son muy lerdos. Si yo no dejo asentado, todo me puede jugar en contra. Por eso tengo que ir y denunciar cada contacto que él tenga conmigo, ya sea por llamadas de teléfono o en la calle”, explicó. 

violencia de género, ni una menos,