Para los círculos más tradicionalistas de Mendoza y que mantienen el poder de influencia en las decisiones colectivas, aún es una realidad que lo que publica el diario Los Andes es como un certificado de existencia pública. Por eso, para esos sectores, son importantes sus posiciones editoriales, las columnas de opinión o análisis políticos. Con esta advertencia es que se debe leer el texto firmado por Marcelo Zentil, el editor de la Sección Política del diario centenario el domingo 10.

El periodista postula las diferencias entre Alfredo Cornejo y Laura Montero, lo que para los observadores no es noticia sino una confirmación. El título directo del artículo es: "Cornejo, Montero y la guerra de los roces". Los detalles señalados hacen un recorrido en los desencuentros entre los componentes de la fórmula gubernamental que asumió el 9 de diciembre. Justamente lo rescatable es que en lo que va del mandato es el primer enfoque periodístico sobre la dupla ya en ejercicio del poder. Antes hubo crónicas previas a las elecciones, durante la campaña, mostrando las diferencias entre ellos.

A propósito, sobre el ejercicio del poder propiamente dicho, el miércoles 29 de junio, antes de iniciar una entrevista en Unidiversidad Noticias, Arturo Lafalla, exgobernador, cuando le pregunté cómo prefería que se lo identificara, contestó con realismo peronista: “Formalmente soy gobernador con mandato cumplido, pero soy exgobernador. El único gobernador es Cornejo, él tiene el poder real”. Una definición adecuada para esta evaluación.

Con ese contexto hay que ver este sumario de roces que compila y ordena de este modo:

1- Después de la renuncia de Rodolfo González como procurador de la Corte, se hizo escuchar la vice, que ya se había quejado al inicio de la gestión sobre la falta de participación femenina en la conformación del gabinete de Gobierno, de la cual no participó. Puntualiza el informe: “Montero pidió más presencia femenina en los lugares clave de la Justicia. Cornejo, extrañamente, le respondió también por los medios: la mayoría de los jueces, fiscales y abogados defensores son mujeres. Y en cierta manera, minimizó que no ocupen puestos en la cúpula de la estructura judicial porque allí, dijo, llegan pocas causas”.

Dato que aporta la nota: trasciende el nombre de la jueza Gabriella Ábalos (esposa de Gabriel Fidel) si se produce una nueva vacante en la Corte. Esta proyección es producto del estado de salud de Herman Salvini (advertido por MDZOnline el jueves 7), el más longevo del Ato Tribunal, quien tuvo una hemorragia gástrica y se especuló que esto era determinante para que decidiera su renuncia.

2- Montero se opuso a ultranza a la política de alianzas, fundamentalmente con el PRO, que impuso Cornejo a fines de 2014. Luego, ella se volvió una defensora de la incorporación de Sergio Massa al frente local, mientras él afianzaba su relación con Mauricio Macri.

3- Remarca que a los senadores oficialistas les cayó mal la crítica al tarifazo del gas que Montero hizo desmarcándose y apuntando al gobierno central de Mauricio Macri. A la par, sostienen una tensión con la segunda a cargo de la Provincia cuando ella ordenó publicar el listado de los asesores de los parlamentarios.

4- Puntualiza otra rispidez evidenciada cuando la intendenta interina de Santa Rosa, Norma Trigo, no fue a la presentación del informe de estado financiero del departamento que encargó Montero porque no se lo mostraron previamente a la concejala a cargo de la comuna esteña.

5- En ese plano observan los legisladores opositores los chispazos que hay entre ella y su segundo en el Senado, Juan Carlos Jaliff, que según el autor es el puesto por Cornejo para controlar a la vice.

6- Como contrapartida, desde el entorno de Montero aceptan que Cornejo la pone en aviso de sus decisiones, pero a la vez entienden que sólo cumple con la formalidad del anuncio de lo ya definido.

7- Destaca que el último gran conflicto, mucho más que el del cupo femenino en la Justicia, fue el desenlace de la cárcel privada, el proyecto del empresario multirrubro Omar Álvarez. “Montero, acompañada por la fuerza de un par de senadores cercanos, le torció al brazo al cornejismo, que había aprobado la idea en Diputados e incluso ya la había apoyado a fines de 2014, cuando aún gobernaba el PJ. La ley se cayó”.

8- Pero así como parece haber triunfado la vice con la ley para la construcción de una nueva penitenciaría, también marca un atraso en esta puja para Montero. “No tuvo suerte con el avance de su proyecto más declamado: el de ética pública, que ordena la declaración pública de bienes para funcionarios, legisladores, intendentes y hasta jueces. Es claro que a Cornejo no le interesa, porque los proyectos que él impulsó salieron en cuestión de semanas, a lo sumo un mes”.
 

La reforma tan querida y temida

Puntualiza el informe que sólo un proyecto monterista no es criticado desde Casa de Gobierno, que es la reforma integral de la Constitución de Mendoza. Este año la Carta Magna local cumplió 100 años y en el acto del Bicentenario de la Independencia que Montero presidió (Cornejo estaba en Tucumán), ella pidió que “se pensara en la dignidad personal y colectiva de los mendocinos” defendiendo su iniciativa.

Montero tiene frente a sí, de modo soterrado, al Partido Demócrata, conservador y acérrimo crítico de las reformas constitucionales generales porque desde ese espacio aseguran que cada intento reformista integral trae en su vientre el intento de la reelección consecutiva del gobernador.  Así lo admitió Carlos Balter, el titular del PD a Unidiversidad el martes 21 de junio. En esa misma línea, advierte el analista de Los Andes que desde el Gobierno no se objeta a Montero en su emprendimiento reformista  porque “al fin de cuentas, está desmalezando el camino para que Cornejo pueda soñar, por ahora en silencio, con un segundo mandato”.