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04 DE NOVIEMBRE DE 2024
A raíz de los conflictos desencadenados desde el pasado martes, en Villa Soldati – Ciudad de Bs. As.- por la ocupación de terrenos en el Parque Indoamericano; se abrió un debate en el país acerca de los Derechos Humanos, de la ocupación de terrenos, se habla de xenofobia y de una subestimación a la vida. NU Digital, entrevistó al Doctor Roberto Follari -profesor de la Universidad Nacional de Cuyo-, donde brindó su opinión desde una visión sociológica.
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Paradójicamente, el 10 de diciembre, día Internacional por los Derechos Humanos y la Democracia, se produjo en Villa Soldati – Ciudad de Buenos Aires-, un cruento enfrentamiento, dejando un saldo de cuatro personas muertas. Desde los medios afirmaban que era una batalla liberada entre vecinos y extranjeros que se estaban apropiando de terrenos públicos. Desde el gobierno de la provincia de Buenos Aires, se responsabilizaba a la Nación por no permitir actuar a la policía. Desde la Nación se responsabilizaba al gobierno de la provincia de Bs. As., encabezado por Mauricio Macri, por las muertes debido a la represión ejercida por la policía. Mientras tanto, pobres contra pobres libraban una batalla, asesinándose, quitándose mutuamente lo poco que tienen, cuestionándose sus derechos básicos en función de haber nacido de un lado u otro de la frontera argentina.
Una situación más que compleja, una situación que sin duda alguna genera un sin fin de sentimientos y opiniones, una situación a la que amerita pensarla, preguntarse y reflexionar.
NU Digital, en una charla con el Dr. Follari, quién brinda su pensamiento y reflexión para algunas preguntas que surgen de esta realidad.
¿Qué opinión, desde su visión como sociólogo, tiene acerca del conflicto ocurrido en Villa Soldati?
Ciertamente hay problemas de vivienda y hay también un derecho que hace referencia a una condición de vivienda digna para todos; ahora que esto se dispare de golpe como lo que se ha producido aquí, si es probable pensar que haya habido razones políticas que hayan impulsado esto. De hecho las organizaciones sociales que aparecieron en la casa Rosado el otro día, de hecho uno de ellas no era ninguna organización social, era un organización política que todos conocemos y que tenemos acá adentro de la Universidad también; ellos evidentemente han participado por una decisión política porque hay que ver que son ahora unas cinco mil personas, es enorme la cantidad de gente que hay, más de mil familias. Esto muestra que la enorme marginalidad social que dejaron los tiempo neoliberales, que sin bien se ha mejorado, esta muy lejos de ser superado, que ni con magia se puede hacer a gran velocidad, se va haciendo paso a paso y por supuesto entonces hay reivindicaciones que surgen de estos sectores.
Ahora el choque que se produjo con los vecinos, que obviamente había infiltrados también notoriamente por gente que no tenía nada que ver en este conflicto; sin dudas a veces es un poco difícil de evitar dado que la lectura que suele hacerse es algo así como los extranjeros como gente que no trabaja, que no paga impuesto, cómo le van a dar derecho a tener una casa y no todos los vecinos tienen una casa propia eso es verdad; pero también es verdad que, primero, no todos los que estaban adentro son extranjeros, eso es un exceso muy fuerte que se ha hecho para estigmatizarlo y al cual apeló el Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires: Macri. Segundo que muchos de los que están allí dentro si trabajan, y trabajan en cosas que a veces los argentinos no queremos trabajar, trabajan en lo que no estamos nosotros dispuestos a hacer, no vienen a quitarnos el trabajo en general, vienen a hacer trabajo que nosotros no hacemos. Lo tercero es que la Argentina es un lugar abierto como cualquier otro lugar del mundo, y lo ha estado históricamente, a personas que vienen de otros países siempre y cuando estas personas no afecten la convivencia cotidiana nuestra, tiene todos los derechos y bueno el derecho a la vivienda es uno de esos derechos. Sin duda que lo que se ha dado es una pelea de pobres contra pobres y que ha sido azuzada, aparentemente, de los dos lados; tanto de los que hicieron la ocupación como de quienes fueron luego a reprimirlas.
Desde el discurso de los medios opositores, hegemónicos, ha tratado de llevar esto al punto de caos del 2001, ¿hay alguna similitud?
No hay ni la más mínima ni la más remota, por ahora, posibilidad de que eso tenga algo que ver con el 2001. Por supuesto que ese es el propósito con que algunos han hecho esto, con que algunos han intervenido en este conflicto por lo tanto ellos quieren que haya un 2001, porque quieren voltear al gobierno e instalar una actitud golpista, una actitud desestabilizadora más o menos abierta, que la conocemos. Además se va advirtiendo una muy buena posición electoral por parte del gobierno nacional y tienen ya muy pocas armas electorales para tratar de vencerlos, con lo cual se esta apelando aparentemente a las formas más bajas de la oposición, proponiendo prácticamente un muerto por semana o más. Pero de ninguna manera, aquí el gobierno tiene un apoyo popular muy grande que no tenía en absoluto el gobierno de De La Rua y la estabilidad política básica esta garantizada, mientras que aquél era un gobierno que se caía a pedazos por su propia impericia. Por cierto, claro, los opositores al gobierno son muchos esos mismos que tenían impericia en el 2001 y que así como se tuvieron que ir por la ventana, sueñan con volver por la ventana con algún otro 2001 inventado más o menos de manera artificiosa.
Desde el gobierno se dice que este conflicto es producto de una mala gestión de Macri y Macri responsabiliza a la presidenta por las muertes ya que exhortó a la policía a no actuar ¿cuál tendría que hacer sido el accionar correcto para haber evitado el menos daño posible?
Bueno esto es difícil de ver, son decisiones políticas y como tales son decisiones, como siempre, discutibles. Yo creo que lo que el gobierno argentino ha venido haciendo es no reprimir las protestas sociales; eso es un hecho excepcional. Yo quiero destacar que el presidente Mujica, que es un hombre progresista, que ha estado preso por sus ideas de izquierda durante 15 años, torturado, etc., tildó de nazis a los huelguistas que en estos días no querían levantar la basura en la ciudad. Digo esto para mostrar como, ante una huelga que es un hecho mucho más legal que una toma, un gobierno de izquierda tiene una reacción enormemente crispada y enormemente de rechazo. El gobierno argentino no ha hecho ningún tipo de imputación contra los que tomaron el predio, a pesar de que los que tomaron el predio le crean , por decirlo así, al gobierno un problema enorme y a pesar de que en ellos hay, insisto, hay sectores políticos que se dedican a crearle problemas habitualmente; sin embargo, la reacción ha sido irreprochable desde el punto de vista ideológico. Ha sido sorprendente porque nos hemos acostumbrados a que nos parece común que no se reprima cuando una acción como esta, cualquier otro sector político argentino, o casi cualquier otro, lo hubiese reprimido violentamente desde el primer día. Y violentamente significa con muertos. No es que los muertos se producen porque no hay represión, es precisamente porque se reprime que hay muertos.
Ahora es verdad, yo diría, que no reprimir es necesario pero en algunos casos complejos como este es insuficiente. Entonces además de eso se debió, quizás, haber enviado antes a gendarmería; yo creo que hubiese sido una manera de evitar el ataque por medio de estos llamado vecinos; si sí habían vecinos efectivamente pero también habían otros que no eran vecinos y que aprovecharon para otro tipo de fines. Pero sin duda que no tiene ningún punto de comparación la actitud del gobierno de la Nación con el gobierno de Bs. As. que se mostró racista, xenófobo, y lo único que plantea es reprimir, que no tiene ni la menor de nada, una falta de cultura, de una falta de altura histórica para entender un proceso como este. Propio de un señorito como lo es Macri que jamás ha visto gente de este tipo cerca de su casa, no los conoce, no sabe qué hacer con ellos, no tiene la menor idea de este problema, es un ignorante total de lo que pasa en los sectores más pobres de la sociedad y, entonces, su reacción ha sido desmesurada, desubicada, xenofoba e indigna de lo que corresponde al Estado argentino. Si por él hubiese sido, habría habido muertes por represión y ningún reconocimiento de las personas como sí lo ha habido por parte del gobierno argentino que, insitos, pudo desde el punto de vista de la eficacia, haber evitado tanto daño si la gendarmería hubiera llegado antes.
A raíz de este conflicto se ha puesto en tela de juicio, en la sociedad, hasta donde una persona tiene derecho a una vivienda digna, siendo que esa persona no trabaja, no paga impuestos, etc. ¿Qué tan válido es este planteo?
La protesta que puedan hacer algunas otras personas no es del todo injusta porque es verdad que en este tipo de cuestiones hay gente que le tocó un plan social y a otros que no, hay gente que le tocó un plan de vivienda y a otro no; no siempre hay razones claras y objetivas para que uno tenga mejores condiciones que otro. Yo creo que los argentinos y los gobiernos tiene que ir por la positiva y no por la negativa; si al otro le dan bueno busquemos que a mi también me den y no quitarle al otro, no veo que sentido tiene decir “no, no le demos nada a ellos” como si por no darles nada a los otros le van a dar algo a ellos, no es así. Entonces hay algo así de una protesta un poco torpe. Yo insisto que la mejor manera de entender por parte de los argentinos cómo se puede tratar a personas que en algunos casos son extranjeros, no todos pero sí en algunos casos de los que han tomado el predio son extranjeros, es recordar que los argentinos somos los bolivianos de España. Los argentinos somos parte de los extranjeros, no de los más pobres pero si parte, de los extranjeros que están en España, casi todos tenemos algún pariente en España. Yo quiero imaginar cómo nos sentiríamos si nos trataran con el desprecio que algunos argentinos tratan a los bolivianos. Si nos dijeran en España con 20% de parados como tienen, que nos fuéramos para evitar quitarle el trabajo a los españoles; cosa que los españoles no han hecho en lo absoluto a pesar de que están repletos de extranjeros de todas parte, entre ellos muchos argentinos. Si nosotros tratamos mal a los de afuera, nos van a tratar mal a nosotros; entonces seamos más cuidadosos porque a veces nos toca ganar y a veces perder. En este momento Argentina puede ser un país más fuerte que Bolivia pero somos un país mucho más débil que España. Hemos necesitado de España y de otros países cuando fue el desastre del 2000 – 2001 que cometieron los opositores actuales cuando gobernaban este país; que estaban llenas las colas en los consulados, todo el mundo tratando de salir desesperados y nos recibieron bien; nos podrían haber recibido peor sin duda. Habrá habido algún gesto de racismo por supuesto, marginal, pero mayoritariamente hemos sido bien recibidos. A nosotros nadie nos dice en otros países “usted no tiene derecho a una casa porque no nació aquí”. Si estamos en un plan y hay igualdad de condiciones un argentino que un español, al argentino se le da igual que al español. Vamos a los hospitales, en España aunque los argentinos no tengan papeles son tratados en cualquier hospital gratuitamente. Entonces, seamos cuidadosos con lo que hacemos, no tiremos hacia arriba tierra que después nos cae encima.
Analía Martín.
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