El elenco de teatro de la Facultad de Derecho (FD) de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO) presentará este jueves 14, a las 20, en el Teatro Quintanilla, una obra basada en el Juicio a las Juntas Militares. Se trata de una producción inspirada en la película El Juicio, dirigida por el cineasta argentino Ulises de la Orden, en coproducción con Italia, Francia y Noruega.

El elenco está integrado por estudiantes de la cátedra de Criminología y del taller de teatro de la FD, a cargo del profesor Adrián Sorrentino. La obra, que se propone celebrar los 40 años de democracia, cuenta con un guion adaptado por el profesor Alejandro Poquet.

El docente relata que, luego de ver el filme, pensó en adaptar las más de tres horas de la película a un formato que pudiera llevarse al teatro, con una duración de 50 minutos: “Hablé con Adrián Sorrentino y le encantó la idea, me dijo que era factible, que ya se la representaba arriba del escenario y lo veía como teatro leído”.

La idea fue, a 38 años del juicio, mostrar aspectos críticos tanto de la acusación como de la defensa para que el público pueda tener un viaje al pasado y discutir los temas que son de plena actualidad, como algunas posturas negacionistas. Es una manera de conocer y analizar la cantidad de casos que se trataron, el tiempo que insumió, las penas, las condenas, las críticas al juicio por parte de los acusados y el testimonio de las víctimas, entre otros aspectos. 

El guionista resalta el valor de la obra para analizar el tema jurídicamente, políticamente y socialmente. Permite estudiar el suceso histórico desde el punto de vista de los derechos humanos y dentro de lo jurídico, desde el derecho penal, el derecho procesal penal y la criminología.

“Es importante que la gente que nació en democracia pueda ver lo que pasó no hace mucho tiempo atrás en nuestro país. Seleccioné y adapté las partes más impactantes, prácticamente inverosímiles, que no se pueden creer que hayan pasado en la Argentina”, explica el autor del guion teatral.

De la cátedra a las tablas 

Poquet cuenta que la obra está muy relacionada con la materia que dicta en la Facultad: “Soy profesor de Criminología y esto también es crimen organizado, inteligencia criminal. Es el crimen desde el Estado, es terrorismo del Estado, y también es ver cómo la democracia puede hacer frente a eso”. 

El jurista destaca la participación de alumnos de la Facultad, porque la formación jurídica tiene que estar enriquecida con una mirada artística; es decir, la ética y la estética que están en el artículo 1 del estatuto se tienen que ver reflejadas. "El alumno, cuando se recibe, tiene que ser una persona crítica y no se puede ser crítica si no tienen estas dos miradas, la ética y la estética", considera el docente. “Siempre el arte estuvo vinculado a la literatura, estrechamente vinculado al derecho. Se trata, con esta obra, de recuperar esa antigua y olvidada tradición” , recalca Poquet.

A 40 años del retorno a la democracia

La obra se da en el contexto del aniversario de los 40 años de democracia y la reciente creación en la UNCUYO del área de Derechos Humanos. En referencia a estos sucesos, Poquet explica: “Los derechos humanos han venido a ocupar un lugar el cual ya no hay vuelta atrás y cada vez tiene que ser mayor. El espacio de los derechos humanos es infinito, cada vez más derechos, más libertad, y esta obra permite actualizar la reflexión”. 

Hay un resurgimiento de la pregunta sobre la importancia de la democracia y diferentes encuestas revelan que, ante las dificultades económicas, la democracia pierde valor. En ese escenario, es fundamental recuperar estas preguntas y qué mejor que hacerlo desde el arte, que “permite llegar a todas las personas sin ninguna discriminación; más allá de las ideologías, va derecho al corazón de la gente”, apunta el docente universitario. “Hay muchos chicos que votaron, que nacieron en democracia. Tal vez no les hace falta reflexionar sobre algo que tienen como el aire, pero es muy importante recordar que todo lo que podemos hacer, nuestra elección existencial, nuestro plan de vida, solamente se puede realizar en democracia”, cierra Poquet.