El ministro de Hacienda de Chile, Rodrigo Valdés, y el de Economía, Luis Felipe Céspedes, presentaron este jueves 31 su renuncia a la presidenta Michelle Bachelet, tras desacuerdos sobre política económica, lo que provocó una crisis institucional a tres meses de las elecciones presidenciales. "Hoy he presentado mi renuncia a la presidenta Bachelet y ella la ha aceptado", dijo el ahora exministro Valdés en una declaración ante la prensa en el Ministerio de Hacienda. Poco después se sumó Céspedes y también dimitió el subsecretario de Hacienda, Alejandro Micco.

La renuncia de Valdés se produce 10 días después del rechazo al millonario proyecto de inversión minera Dominga, en el norte del país, que dividió al gabinete de la coalición que preside la socialista Bachelet.

Valdés se había mostrado favorable a la inversión de casi 2500 millones de dólares en las cercanías de una zona de protección ambiental, pero económicamente deprimida, mientras que Bachelet había respaldado públicamente al ministro de Medio Ambiente, Marcelo Mena, que lideró el rechazo a la iniciativa. "Las cifras económicas comienzan a mostrar un mayor dinamismo; avanzar sostenidamente hacia mayores niveles de crecimiento requiere disciplina y decisión del gobierno, y espacio para que el sector privado pueda despegar su iniciativa con reglas claras y estables", explicó Valdés, "pero creo que no logré que todos compartieran esta convicción", agregó el economista.  

El nuevo gabinete

A las horas de la renuncia del gabinete, la presidenta anunció el nuevo equipo económico: en sustitución del titular de Hacienda, asume el cargo el hasta ahora ministro secretario general de la Presidencia, Nicolás Eyzaguirre, cuya cartera será ocupada por el actual subsecretario, Gabriel de la Fuente, según indicó el diario El Mercurio. En tanto, el Ministerio de Economía, Fomento y Turismo queda en manos de Jorge Rodríguez Grossi, un economista demócrata cristiano que ocupaba el cargo de presidente del BancoEstado (banca pública) y quien ya fue ministro durante el gobierno del presidente Ricardo Lagos (2000-2006).

"Cada uno de quienes hoy se integran a sus nuevas carteras asumirá desafíos importantes para consolidar el ciclo de cambio que hemos puesto en marcha como gobierno y que presenta importantes exigencias en cuanto a la agenda legislativa que enfrentamos para este año", dijo Bachelet durante la ceremonia de cambio de gabinete, celebrada en el palacio de La Moneda.  

La tensión era evidente

Como pocas veces se había visto, un secretario de Estado se manifestaba abiertamente contrario a una decisión presidencial. Se trataba del titular de Hacienda Rodrigo Valdés y el punto en discordia era el rechazo del consejo de ministros al proyecto minero Dominga, según publicó el diario La Nación, de Chile, a fines de agosto. 

La relación era de tensa calma en el Palacio de Gobierno. Se trataba del ministro más técnico, a cargo del presupuesto fiscal, y el más importante dentro del gabinete sectorial, para algunos expertos, los mismos que coinciden en decir que la presidenta Michelle Bachelet le “quitó el piso”.

La tensión se hizo más evidente cuando el mismo ministro abandonó el Palacio de Gobierno durante una ceremonia oficial y luego evitó hablar con la prensa. Ahora, el malestar estalló con la renuncia y genera un nuevo escenario político en el país trasandino con miras a las elecciones.