El caso de la desaparición de Florencia Romano, de 14 años, tuvo una novedad importante este jueves luego de que la Unidad Fiscal de Homicidios decidiera imputar por “femicidio en grado de coautoría” a la pareja detenida, sospechada de ser el último lugar registrado donde estuvo la joven.

El Ministerio Público Fiscal que las pruebas para avanzar con la imputación son videos y el hecho de que estuvo en esa casa de Maipú.

La pareja detenida, que está prevista que sea trasladada a la cárcel, está conformada por Pablo Ramón Arancibia, de 33 años, y Micaela Estefanía Méndez, de 27 años.

Mientras tanto, la adolescente no aparece y este jueves se convocó a una manifestación en el Microcentro de Ciudad para pedir por la aparición de Florencia Romano.

La desaparición

Florencia Romano dejó de ser vista el sábado a las 12 cuando salió de su casa de Guaymallén. Se despidió de su madre y le dijo que se iba a juntar con unas amigas en una pileta de Maipú. Según los registros de su tarjeta SUBE y registros de las cámaras, llegó a las 12.40 a ese departamento. 

Sin embargo, durante ese trayecto, la joven de 14 años le escribió a una de sus amigas para avisarle que no iba a ir a esa pileta.

Para dar cualquier información sobre el caso, las autoridades pusieron a disposición las líneas telefónicas (0261) 4416982/83/84 y a la línea 911.

Luego, cerca de las 19, Florencia volvió a escribirle a esa amiga para invitarla a una supuesta fiesta clandestina que se iba a hacer en Gutiérrez. Quedaron en juntarse en ese evento a las 20, pero nuevamente Romano le escribió a su amiga para cancelar la invitación. A partir de ese momento, no hubo más señales del celular de la joven y la madre realizó la denuncia. 

El contacto previo con la pareja

Según explicaron allegados a la causa, el contacto que estableció la pareja con la joven Romano fue hace un mes a través de la red social Instagram. Si bien no puntualizaron el contenido de las conversaciones, aseguraron que se trataba de una relación “amistosa”. Este contacto previo permitió a la Justicia poner la lupa sobre estas personas, que viven desde marzo en el domicilio ubicado en Maipú.