Daniel Pizzi, secretario de Desarrollo Institucional del Rectorado, y Jorge Barón, codirector del programa Sistema de Investigación Geodinámica Monte Aconcagua (SIGMA) son los representantes del Interclaustro, un grupo que, como ellos definen, "está conformado por integrantes de partidos políticos como el radicalismo, el socialismo, Libres del Sur e independientes".
Daniel Pizzi, candidato a rector, y Jorge Barón, candidato a vicerrector por Interclaustro. Fotos: Axel Lloret.
Llevan seis años trabajando juntos. Para ambos esa situación es una virtud a la hora de ser una de las fórmulas que se presenta para gobernar la Universidad Nacional de Cuyo.
¿Desde cuándo se conocen?
Barón: Desde hace cinco o seis años, trabajamos juntos en la Secretaría de Desarrollo Tecnológico. En el Citec, Daniel es el representante legal y yo, el representante técnico. Llevamos unos años trabajando juntos en la Universidad.
¿Por qué se presentan como candidatos para rector y vicerrector?
Barón: En este espacio plural que es el Interclaustro, se dieron en primer lugar cuatro candidatos y se fueron descartando, discutiendo mucho, con disenso. Los espacios plurales son fáciles de decir y difíciles de construir. La fórmula se dio a través de un trabajo horizontal, ya que no viene impuesta por ningún sector que integra el espacio.
¿Cuáles son los pilares en los que está basada la propuesta del Interclaustro?
Pizzi: Nosotros tenemos cuatro pilares que son el pluralismo, la inclusión, el reformismo y la autonomía. Sobre la base de estos pilares es que hemos trabajado la propuesta que queremos para la Universidad Nacional de Cuyo. Pero además, sobre la base de este discurso, se fue acercando gente y lo sigue haciendo. Creemos en la pluralidad, en escuchar lo que tenemos todos para decir.
¿Qué importancia tiene la política partidaria en el espacio?
Barón: Yo soy la figura independiente de la fórmula.
Pizzi: Yo tengo mucha amistad con gente del radicalismo y fui llegando a los distintos cargos que ocupé, fuera y dentro de la UNCUYO, junto a personas de esa extracción partidaria. Fui gerente general del Instituto de Desarrollo Rural (IDR) durante la gestión de (el exgobernador) Roberto Iglesias (1999-2003) y subsecretario de Agricultura durante la gestión de Julio Cobos (2003-2007). Llego a la gestión universitaria de la mano de Gustavo Kent (vicerrector fallecido, de extracción radical).
¿Qué fuerzas políticas integran el Interclaustro?
Pizzi: Está conformado por el Movimiento Nacional Reformista (MNR), Libres del Sur, el socialismo y los independientes. En este sentido, queremos dejar en claro que estamos en condiciones de distinguir de qué se trata la política partidaria y qué pretendemos para la política universitaria. Tenemos una relación impecable con los partidos políticos, pero creemos absolutamente en la autonomía de la universidad.
¿En el Interclaustro existe esa autonomía respecto de los partidos?
Pizzi: Creo que sí, con vaivenes y matices. Lo acordado en el Interclaustro es una absoluta independencia cuando hablamos de política universitaria.
Barón: Hay que trascender el gobierno de turno. La temporalidad es un factor en ese sentido, para plantear la autonomía como valor de la reforma universitaria. Lo que decimos también es que la universidad no puede estar de espaldas a la sociedad, incluidos los gobiernos, pero diferente es el caso de que haya una bajada de línea y que se diga desde afuera qué es lo que hay que hacer.
Pizzi: Como universidad no se puede discriminar a nadie, no se puede dejar de atender ningún pedido que venga de cualquier partido político porque no estoy de acuerdo con esa ideología.
Barón: De hecho, en el Interclaustro hay personas que son filoperonistas o filokirchneristas. No creemos que la autonomía que planteamos o la inclusión sean propiedad de ningún partido político.
Dicen que sus pilares son el pluralismo, la inclusión, la autonomía y el reformismo. Sostienen que van a salir a escuchar a los diferentes claustros durante la campaña. Creen que hay que profundizar el vínculo de la universidad con los sectores productivos. ¿Cómo será la campaña?
Barón: Es una etapa nueva que cambia las reglas del juego. Hay ciertas pautas establecidas en el Interclaustro, incluso existe una comisión de campaña. La clave es hacer conocer a todos los claustros y las unidades académicas nuestra propuesta de gobierno. Pero además, una de las cuestiones centrales que nos planteamos es ir a escuchar las problemáticas de cada unidad académica. No creemos en una autoridad vertical.
Pizzi: Queremos hacer foco en la calidad de la gestión. Tenemos mucha claridad conceptual para identificar el problema pero poca capacidad para gestionarlo en la universidad. Cuando uno se acerca a los diferentes espacios, se da cuenta de que el problema sigue estando por falta de gestión. Quiero hacer énfasis en esto porque tiene que ver con lo que hablábamos de la autonomía. De las últimas diez licitaciones que se han hecho en la UNCUYO, hemos concretado solo dos. Hay que hacer transformaciones en la universidad desde el punto de vista de lo operativo.
Además de lo operativo, ¿qué otros puntos creen que hay que cambiar?
Barón: Hay un trabajo que se viene haciendo, de inclusión, pero creemos que hay que reforzarlo.
Pizzi: Estamos pensando en un sistema de becas, pero además en tecnologías modernas, en crear campus virtuales para que la movilidad estudiantil no sea un obstáculo para aquellos alumnos que no pueden viajar. Por otro lado, hay alumnos que tienen la disposición intelectual pero tienen problemas de salud y abandonan, y eso no es tenido en cuenta.
Barón: Queremos que los estudiantes entren y se queden, no que se vayan en segundo año.
Pizzi: Otro de los temas concretos a trabajar es la efectivización de los profesores. Tomamos conciencia de la gravedad del asunto justamente a la hora de armar nuestra lista, necesitábamos profesores efectivos pero en todos los rangos había muchos interinos.
Si las elecciones fueran hoy, ¿de dónde piensan que vendrían los principales votos?
Pizzi: Nosotros creemos que hay un grupo muy importante de profesores que nos votará, pero también creemos que los apoyos vendrán de los estudiantes.
Barón: Creemos que el espacio va a crecer en este tiempo en todos los claustros de la universidad. Venimos a proponer escuchar a los sectores y hay una percepción en muchos de ellos de que no se los escucha, como por ejemplo sucede con el personal de apoyo.
¿Qué ha hecho bien esta gestión?
Barón: Apoyar todo este proceso de reforma, no solo de las autoridades del rectorado. Eso se logra a través de un trabajo amplio y sostenido que comenzó con la gestión de María Victoria (Gómez de Erice) y se ha generado además una apertura de la universidad a la sociedad. Éramos poco proclives a mirar a la sociedad y eso ha cambiado. Lo que hay que profundizar es el vínculo de la universidad con los sectores productivos.
Pizzi: Coincido también que hay un esfuerzo que se ha hecho por mejorar la relación de la universidad hacia afuera.
¿Con qué figuras de la política nacional se identifican?
Pizzi: Somos de una posición de centro, centro izquierda, nos sentimos identificados con la socialdemocracia, más allá de los independientes.
Barón: Yo lo voté a Alfonsín, no lo voté a Néstor Kirchner, sí voté la Concertación y también voté en las últimas elecciones presidenciales a Cristina Fernández de Kirchner. A futuro es incierto como sigue la historia, pero estoy convencido de que son figuras profundamente democráticas.
¿Qué opinan de los debates sociales, como el consumo de drogas, que se plantean en el anteproyecto de Código Penal?
Barón: La penalización hace que se desvíe el tema hacia otros intereses. Creo que hay que debatir y tengo claro que el sistema así como está, no funciona.
Pizzi: Creo que la universidad tiene que asegurar un espacio de discusión. La universidad no puede ser ni pro ni contra; lo mismo ocurre con el aborto. Tiene que haber un ámbito donde las distintas opiniones se escuchen.
¿De qué se quejaban cuando eran estudiantes?
Barón: Yo estudié Ingeniería en San Juan y luego dos años de Ingeniería Nuclear en el Instituto Balseiro. Eramos estudiantes en la época de la dictadura. De todo lo que nos quejábamos nos reprimían. Una de las quejas que teníamos en esa época era de la poca participación estudiantil, de la escasa vinculación que tenía la UNCUYO con el medio social. Creo que ahora lo que hace la universidad con tantas evaluaciones institucionales es dar un mensaje que es: “Yo no soy el dueño de la verdad”.
Pizzi: Yo fui al Liceo Agrícola y luego a Ciencias Agrarias. En mi caso, éramos muy básicos. Sí teníamos vinculación con el medio, porque Ciencias Agrarias siempre hace mucho trabajo de campo. Nuestro problema era comida y logística, había que llegar a Ciencias Agrarias. De hecho, yo como delegado en cuarto año tomé dos o tres veces el tren.