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21 DE NOVIEMBRE DE 2024
Ante la polémica que se desató por las promesas de campaña de solucionar los problemas habitacionales de la Provincia de Mendoza, NU Digital entrevistó al Ingeniero Carmelo Simó. El director del Instituto Provincial de la Vivienda habló sobre las posibilidades de remediar estas deficiencias ¿son viables estas promesas?
Montaje: Axel Lloret
El Ingeniero Carmelo Simó es director del Instituto Provincial de la Vivienda, tal como pasa cada 4 años durante las campañas se discuten con más frecuencia y fervor determinados temas: Vivienda, salud, seguridad, trabajo, entre otros. Ante la gran cantidad de promesas electorales, que incluyen hasta planes de casas por $90, el funcionario se convierte en palabra autorizada para hablar del tema… ¿es posible construir casas a tan bajo coste como en la provincia de San Luis?
“En realidad en la provincia de San Luis es viable, en un principio porque ellos tienen la misma coparticipación de la cuota anual FONAVI, reciben el mismo dinero que Mendoza pero tienen un tercio de la población. Los recursos FONAVI y los planes federales, hasta ahora, vienen a la provincia en carácter de subsidio o como monto no reintegrable. El gobierno, o el Instituto pueden darse el lujo de poner un costo que ni siquiera va a amortizar la vivienda” explicó Simó.
Las implicancias que explica el funcionario tienen dos impactos, por un lado ante un mismo número de casas construidas en San Luis y Mendoza, en la primera se cubrirá una mayor porción de población; por otro lado al ser montos no reintegrables las provincias pueden cobrar una cuota simbólica. Según el director del IPV “cada año la Nación manda la cuota anual FONAVI y los recursos para los planes federales, en la provincia de Mendoza recibimos una suma similar a la provincia de San Luis. Nosotros hemos tenido que cobrar la vivienda con precios cercanos a los de los alquileres, me parece que es razonable la cuota que cobramos, hoy por hoy un alquiler es mucho más de $90”.
Según manifestó el Simó la situación de Mendoza es mejorable, pero no es mala. Las políticas llevadas durante los últimos años en términos financieros han colaborado a mejorar la situación de vivienda en Mendoza. “Entonces yo entiendo que en este programa no sé si existen posibilidades, o si estos recursos o plata de la provincia de San Luis se puedan venir a construir a la provincia de Mendoza (…) Nos costó muchísimo, en el año 2009 la ley que permitiera conformar el fideicomiso, la empezamos a trabajar en los primeros meses del 2009 y recién salió a finales del mes de septiembre o primeros días de octubre, recién el 15 de octubre pudo figurar en estos convenios con Nación. En marzo de este año se pudo crear alguna medida dentro del IPV que permitiera mejorar los indicadores de facturación, recupero, morosidad y demás. Tuvimos que someternos a la evaluación de una calificadora de riesgo, que se llama Standard and Poor’s que calificó a los bonos del IPV con AA que es una excelente calificación” aclaró.
Carmelo Simó defendió estos instrumentos y aseveró “creo que hay que seguir trabajando con estas herramientas financieras. Hay que seguir trabajando con un programa pensado para satisfacer las necesidades de familias de escasos recursos como el ‘Programa de Integración Socio-comunitaria’ que es un programa que financia la construcción de viviendas en base a cooperativas de trabajo conformadas por los propios beneficiarios y que además tienen que tener un integrante desocupado en la familia. Estas personas reciben una capacitación, un subsidio para comprar herramientas y además el financiamiento para la construcción de las mismas”.
Por otra parte el ingeniero opinó que aquellos que más tienen, deberían ser los que más paguen, en lo que se refiere a impuesto inmobiliario. De forma tal que así se financiaran hogares para la gente de menos recursos “yo tengo la suerte de tener casa propia, sería razonable y justo que todos los que tenemos la suerte de tener casa propia pagáramos un poco más de impuesto inmobiliario, pensando que así se genera un resto que viniera al IPV, para que otros mendocinos tuvieran su vivienda”.
Con respecto a la polémica que se desató en torno a las casas desocupadas del último censo, el Carmelo aseguró “vimos en los datos del último censo que existen más de 70000 viviendas desocupadas, muchas de ellas han de ser casas de fin de semana, otras serán de alguna gente que sus ahorros los han invertido en una vivienda, en un departamento como para venderlo o alquilarlo. O existen empresas constructoras que han construido edificios de departamentos y los tienen a la venta. Yo no te podría dar una respuesta de qué se debería hacer porque creo que aquel que ahorró e hizo su casita de fin de semana tiene su derecho a poder disfrutarla el fin de semana”. Y aclaró “no se trata de viviendas construidas por el IPV las que están vacías”.
Como en toda campaña escucharemos aún muchas más promesas en el mes que queda por delante hasta el 23 de octubre. Es importante que el voto de cada uno sea realizado con convicción y no por la televisión.
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