La policía internacional arrestó este miércoles a seis personas en España, el Reino Unido y Alemania por su presunta pertenencia a una célula internacional de la agrupación terrorista Estado Islámico (EI), que realizaba labores de adoctrinamiento y captación de yihadistas a través de las redes sociales.

"Los detenidos justificaban y enaltecían la yihad violenta apoyando públicamente acciones suicidas similares a las realizadas en Europa y actuaban bajo un compromiso férreo a la organización terrorista DAESH (acrónimo en árabe del Estado Islámico)", informó el Ministerio del Interior español en un comunicado.

La célula tenía ramificaciones internacionales y elaboraba y difundía material audiovisual muy radical, organizando además reuniones clandestinas semanales para determinar la voluntad de jóvenes afines a su ideario y lograr que viajaran a zonas de conflicto.

La investigación se inició en 2015 en España, cuando se detectaron en una página web una serie de videos que mostraban el proceso de adoctrinamiento, captación y viaje a Siria de un joven musulmán residente en el país. Las pesquisas llevaron a los agentes a identificar al promotor de esos videos, un imán salafista residente en el Reino Unido que estaba siendo investigado por varios países europeos y que fue detenido a raíz de esta operación policial.

El predicador había viajado hacía dos años a Palma de Mallorca para crear una célula para ejercer funciones de captación, adoctrinamiento y radicalización en favor de DAESH, yse  convirtió a partir de ese momento en su líder espiritual. El grupo radicado en Palma de Mallorca –ahora desarticulado con el arresto de cuatro personas– había multiplicado progresivamente el número de adeptos, no sólo mediante su actividad en las redes sociales, sino también mediante reuniones semanales clandestinas.

El detenido en Alemania tenía al mismo imán como referente espiritual e ideológico y mantenía contacto directo con el resto de arrestados, así como también había participado en la elaboración de los videos propagandísticos del grupo.

Si bien la policía conocía el discurso radical del predicador, las medidas de seguridad que adoptaba en sus actividades de captación y recaudación de fondos para Siria habían dificultado la obtención de pruebas y, por lo tanto, su detención.

Sin embargo, la polarización de los sospechosos, su total compromiso y adhesión a las directrices del DAESH, su justificación de los actos terroristas solitarios realizados recientemente en Europa y su propia disposición a realizar la "yihad violenta" desencadenaron el operativo policial. Desde junio de 2015, cuando España elevó a 4 –en una escala de 5– el Nivel de Alerta Terrorista, las fuerzas de seguridad detuvieron a 178 presuntos yihadistas en operativos realizados en España y en el extranjero, cifra que se eleva a 223 desde principios de aquel año.