En su segundo día de estadía en Mendoza, el ministro de Educación y Deportes, Esteban Bullrich, consideró que la oferta de aumento salarial del 17 % para los docentes es razonable, ya que ese porcentaje es ajustable a la inflación, por lo que pidió a los gremios la misma razonabilidad para negociar y lograr así que las clases comiencen el 6 de marzo, como está previsto.

Bullrich llegó a Mendoza el miércoles 8 y presidió la reunión del Consejo Federal de Educación. Durante esa primera jornada, los gremios se instalaron en la puerta del hotel Intercontinental para reclamar que la cartera convoque a una paritaria nacional para fijar un salario mínimo, así como condiciones laborales. El funcionario contestó que ya quedó establecido que el sueldo se conforma con la base del Salario Mínimo Vital y Móvil, más un 20 %, monto que asciende a 9672 pesos.

Pocas posibilidades de abrir paritarias docentes nacionales

Minutos antes de comenzar el segundo encuentro del Consejo, esta vez sin la presencia de los gremios en la puerta del hotel, Bullrich dialogó en exclusiva con Unidiversidad y negó que el Ejecutivo busque “provincializar” la discusión salarial con los docentes, ya que aseguró que la Nación estableció un mecanismo de actualización automática por el cual el salario inicial del sector será siempre un 20 % superior al mínimo vital y móvil.

Del otro lado, los gremios, tanto nacionales como provinciales que nuclean a los docentes, acusaron al Gobierno de incumplir con el artículo 10 de la Ley de Financiamiento Educativo, que establece que en el seno del Consejo Federal se acordarán distintas pautas generales; entre otras, el salario mínimo docente.

“No estamos provincializando. El salario es provincial. Ahora hay un acuerdo nacional. No cambió nada. No sigamos repitiendo palabras que no son así. La provincialización del salario sucedió cuando Domingo Cavallo le entregó el sistema secundario a las provincias, ahí se provincializó el salario, en los 90”, dijo el Ministro a Unidiversidad.

El funcionario defendió el concepto de racionalidad de la propuesta del 17 %, no sólo porque está ajustada a la inflación, sino porque es una oferta posible teniendo en cuenta la situación fiscal de la Nación y de las provincias.

Respecto de los desequilibrios que puedan surgir entre las provincias (debido a la posibilidad o imposibilidad de alcanzar ese salario mínimo), Bullrich explicó que continuarán utilizando el fondo compensador. Y dijo que actualmente la distribución de ese fondo es más justa, porque en el Gobierno anterior se entregaba con discrecionalidad, mientras que ahora se ayudará a todos los estados provinciales que no puedan llegar al mínimo.

Las desigualdades del sistema

El ministro subrayó que en el seno del Consejo analizarán la unificación de políticas para intentar resolver las desigualdades que tiene el sistema nacional. En este sentido, destacó que le preocupan especialmente las diferencias entre las provincias respecto de la capacitación docente, por lo que estudian alternativas para superar el problema.

Bullrich también se refirió a otro de los problemas centrales del sistema educativo: que más de la mitad de los alumnos que ingresan no concluyen el secundario. Explicó que la cartera que preside trabaja para implementar en el país un sistema que ya funciona en Uruguay y que utiliza la tecnología para detectar a los chicos y chicas que faltan, y así poner en marcha mecanismos para que vuelvan a las aulas.

Ni bien concluya la reunión del Consejo Federal de Educación, Bullrich volverá a Buenos Aires, donde deberá lidiar con los gremios docentes. Al menos, antes de dejar Mendoza, tuvo la oportunidad de degustar la bebida nacional durante la cena que compartió con funcionarios provinciales en El Enemigo, el restaurante que el enólogo Alejandro Vigil tiene en Coquimbito, Maipú.