Con dos diputados de distintos bloques liderando por lejos el ranking, el boletín de asistencias de 2016 en la Cámara baja, donde hubo actividad casi todas las semanas, arroja un balance similar a 2015, con un 4 % más de legisladores con asistencia perfecta, un gran desempeño de los jefes de bloque y algunas sorpresas.

El sitio parlamentario.com elaboró, como cada año, un informe para su Índice de Calidad Legislativa, sobre la base de 24 sesiones (13 especiales, 5 ordinarias, 2 extraordinarias, 2 informativas, una preparatoria y la Asamblea Legislativa del 1.º de marzo), sin contabilizar la única sesión que hubo en minoría. El resultado es contundente: la diputada que más faltó el año pasado fue Dulce Granados, la esposa del intendente de Ezeiza, Alejandro Granados, quien se ausentó en 17 sesiones –más de la mitad del total–, con 3 faltas con aviso y 14 por pedido de licencia sin goce de sueldo.

El segundo diputado más ausente fue el exgobernador riojano Luis Beder Herrera, quien debutó en el Parlamento con 13 faltas. En este caso fueron 8 pedidos de licencia por motivos de salud y 5 faltas con aviso.
 

Desempeño mendocino

En el caso de los diputados nacionales por Mendoza, Susana Balbo (PRO) fue la más faltadora: se ausentó en cuatro oportunidades. Le siguen en el ranking Guillermo Carmona (Frente para la Victoria-PJ) y Graciela Cousinet (Libres del Sur) con tres faltazos.

Luego, con dos faltas cada uno, aparecen en el ranking de El Parlamentario Stella Maris Huczak (PRO), Luis Petri y Patricia Giménez (UCR), y Soledad Sosa (Frente de Izquierda). Le siguen con una sola falta Alejandro Abraham y Rubén Miranda (Frente para la Victoria-PJ).

Por último, y con asistencia perfecta, se encuentra el radical Luis Borsani, que no faltó a ninguna de las 24 sesiones de la Cámara de Diputados de la Nación.