Los productores del Norte del país, se concentraron este miércoles en Plaza de Mayo, de Ciudad de Buenos Aires, con 3 toneladas de bananas y comenzaron a regalarlas. La protesta, que pide con pancartas y cánticos al Gobierno nacional que restrinja la importación de bananas extranjeras al país (sobre todo, de Brasil y Paraguay), tuvo éxito e impacto entre los paseantes, que logró alzarse con una bolsa entera de esa fruta tan rica en potasio.

"Pedimos limitar la importación", rezaba una de las banderas que llevaron los autodenominados "Bananeros Argentinos" que advirtieron que, por la crisis del sector, ellos reciben apenas $1,50 de los $25 que se abona el kilo en la verdulería. "Pedimos que se limite y ponga un cupo al ingreso de banana extranjera en época de cosecha local, que se inicia en el mes de mayo en Formosa y termina en diciembre en Jujuy y Salta", dijo al diario Clarín, Pánfilo Ayala, titular de la Federación Agraria Argentina de Laguna Naineck, Formosa, que aportó varios camiones con mercadería para repartir. 

"Seguir importando grandes volúmenes de bananas es profundizar el desempleo local y agudizar la crisis del sector", agregó Ayala, que marcó que la competencia con Brasil y Paraguay torna muy complicado el desarrollo de la actividad. 

Por su parte, Página/12 habló con Gladys Asselborn, vocera de los pequeños productores de Formosa, quien aseguró.“Agotamos todas las posibilidades de acercamiento a las autoridades tanto provinciales como nacionales y nadie nos da una respuesta. Estamos en un estado de emergencia total. Tenemos que tirar la producción porque no se puede comercializar”.

Según Asselborn, en un solo pueblo de esa provincia los productores desechan 330 toneladas de bananas por día porque el Mercado Central no les recibe el producto. Cuando logran vender la producción, reciben a cambio menos de un peso por kilo cuando en las verdulerías el kilo supera los 25 pesos.

De acuerdo a lo citado por ese diario porteño, los productores piden que se regule la importación en las épocas estacionales de mayor producción local. También reclaman que se incorpore a las plantaciones de banana en la emergencia hídrica, ya que las inundaciones de este año afectaron todos los cultivos.

Para los productores, el bananazo es la última opción. “Están destruyendo a los pequeños productores, que sostienen las economías regionales. Hace veinte años sólo en Formosa teníamos 17 mil hectáreas de banana y hoy hay menos de cinco mil en todo el país”, finalizó la productora.

Mientras tanto, quienes participaron de la protesta bananera no dejaron pasar la oportunidad de llevarse una fruta, e incluso una bolsa entera a su casa. Apoyaron la protesta de los productores y se quejaron del absurdo: mientras las bananas nacionales se pudren en la chacra, su precio en las verdulerías está por las nubes.