A lo largo del semestre, Godoy Cruz disputó 14 partidos en esta Superliga y logró cosechar 23 puntos, promediando siete victorias, dos empates y cinco derrotas. Las conquistas del bodeguero fueron frente a Estudiantes de La Plata, Newell’s, San Lorenzo, Aldosivi, Unión, Atlético Tucumán y Tigre. Las derrotas fueron frente a Talleres, Colón, Defensa y Justicia, Gimnasia de La Plata y Huracán. Las igualdades fueron frente a Argentinos Juniors e Independiente.

El Tomba convirtió 16 goles; cinco tantos fueron de Ángel González y otros cinco, de Santiago García. En tanto, el máximo asistente fue Fabrizio Angileri, con tres pases de gol.

Algo para destacar de este Godoy Cruz es que fue uno de los clubes que menos goles recibió en el campeonato. Once fueron los goles que le marcaron a Roberto Ramírez, aunque el joven arquero surgido de las divisiones inferiores guarda un récord incluso mejor: es el guardameta que más atajadas tuvo en este semestre, con 51.

Este Tomba tuvo varios puntos altos y otros bajos en esta parte del campeonato. Valentín Burgoa fue un jugador capaz de reemplazar muy bien a los que se fueron (Fernández y Garro) y una de las sorpresas en este Tomba.

Una de las desilusiones de este campeonato fueron algunos refuerzos que no lograron amoldarse al juego del Expreso. Es el caso de Osmar Leguizamón e Iván Ramírez, que tuvieron pocos minutos de juego y en varias convocatorias no aparecían entre los concentrados.

Párrafo aparte para Diego Dabove, un técnico que supo conocer y entender la identidad de un club, y cosechó más de 60 puntos en su año a cargo de la dirección técnica en la institución.