Hechos inéditos de Qatar 2022: igualdad en la cancha, pero no afuera

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En el caso de la selección alemana, el equipo protestó este miércoles de un modo particular. Los futbolistas de la Mannschaft decidieron taparse la boca en la fotografía oficial de los once del partido, en una imagen que no ha sido emitida por televisión ni compartida en las cuentas oficiales del Mundial.

La cuenta oficial del combinado que dirige Hansi Flick emitió un comunicado junto a la instantánea en el que deja claro que era deseo de la federación alemana y de los jugadores llevar el brazalete del arcoíris "para defender los valores que tenemos en la selección alemana: la diversidad y el respeto mutuo". Por eso, "queríamos que se oyera nuestra voz" junto a la del resto de países que habían anunciado que llevarían el brazalete. Para ellos, "no se trataba de hacer una declaración política", porque consideran que "los derechos humanos no son negociables". Sin embargo, "todavía no es así", y esa es la razón por la que sostuvieron: "Este mensaje es importante para nosotros". "Negarnos el brazalete es lo mismo que negarnos la voz. Mantenemos nuestra posición", ha concluido.

Wir wollten mit unserer Kapitänsbinde ein Zeichen setzen für Werte, die wir in der Nationalmannschaft leben: Vielfalt und gegenseitiger Respekt. Gemeinsam mit anderen Nationen laut sein. Es geht dabei nicht um eine politische Botschaft: Menschenrechte sind nicht verhandelbar. 1/2 pic.twitter.com/v9ngfv0ShW

— DFB-Team (@DFB_Team)

November 23, 2022

En tanto, la Federación Danesa de Fútbol (DBU) comunicó que no descarta abandonar la FIFA en señal de protesta por la actitud del máximo organismo del fútbol mundial de no permitir el brazalete "One Love". Jesper Moller, presidente del organismo danés, explicó este miércoles que la DBU abrirá un "período de reflexión" sobre el tema, pero no descartó la "medida extrema" de abandonar la FIFA si esta no modifica su oposición al uso del brazalete, publicó este miércoles el diario Mundo Deportivo.

Por su parte, Bélgica también se opuso a la medida y en la inscripción de su camiseta suplente se lee la palabra "Love". En la zona del cuello de la parte posterior de la casaca suplente belga, dice “Love”, “amor” en inglés. Para la FIFA, este detalle no pasó inadvertido y le exigió a la federación belga que elimine la palabra. 

“El diseño de la camiseta se realizó inspirándose en los célebres fuegos artificiales de Tomorrowland y representa los valores comunes de diversidad, igualdad e inclusión”, había expresado la Real Asociación Belga de Fútbol. En cuanto a las federaciones inglesa, suiza y de Países Bajos, sus autoridades cuestionaron la prohibición, pero pidieron a sus capitanes que no lucieran el brazalete para evitar penalidades económicas y deportivas. En tanto, el arquero de Francia, Hugo Lloris, sentenció: "La FIFA organiza la competición, define un marco y unas reglas. Lo que se nos pide, como jugadores, es jugar al fútbol. Prefiero quedarme dentro de mi marco de jugador, pero hay cosas que deben ser apoyadas".

La reacción de la Casa Blanca

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, tildó este martes de "extremadamente preocupante" la prohibición por parte de la FIFA de un brazalete que promueve los derechos de las personas LGTBIQ+ durante los partidos del Mundial de Qatar. "Es muy preocupante ver cualquier restricción a la libertad de expresión, en particular cuando se trata de expresarse sobre la diversidad", declaró Blinken, en respuesta a una pregunta de los periodistas al respecto, en una rueda de prensa en Doha.