La prueba nacional, que fue aprobada en el último Consejo Federal de Educación, está orientada a conocer cuánto saben los estudiantes en esas materias básicas, además de reunir información sobre cómo se trabaja en la escuela. Hoy, 18 de octubre, se evaluarán conocimientos de Lengua y Matemática, mientras que mañana será el turno de Ciencias Naturales y Ciencias Sociales para los alumnos del último año de la secundaria y, a modo de muestra representativa, a un grupo de estudiantes de tercer grado de escuela primaria.

Aprender 2016 involucra a 840 028 alumnos del nivel primario; 518 456 del nivel secundario; 31 365 veedores (directivos); 71 606 aplicadores (docentes presentes en las aulas donde se evalúa); 600 coordinadores de cabeceras (donde se referencia un conjunto de establecimientos); 70 personas de apoyo en grandes provincias y 48 de apoyo en las unidades de evaluación. En total, se movilizarán ese día 1 462 173 integrantes de la comunidad educativa nacional.

Este nuevo modelo de prueba estandarizada, denominada Aprender, fue impulsado por el Ministerio de Educación y Deportes de la Nación.

Si bien la Ley Nacional de Educación contempla operativos de evaluación, este nuevo modelo ha sido cuestionado por diversos sectores del ámbito educativo, desde los gremios docentes a los centros de estudiantes.

El ministro de Educación de la Nación, Esteban Bullrich, defendió su aplicación y aseguró que "vamos a garantizar este operativo, es una pena esta postura, es como enojarse con una radiografía porque el hueso está quebrado". Asimismo, remarcó que algunos sectores docentes "quieren promover un prejuicio, con el miedo de que vamos a realizar rankings o que vamos a tomar datos, pero lo que queremos es tener información para tomar mejores decisiones".

El ministro planteó que existen cuestiones a las que todavía no hay respuesta certera, como "por qué abandonan los chicos el secundario, por qué tenemos problemas de lectura en la primaria o por qué los chicos llegan a la universidad sin comprensión lectora". Y dijo: "La evaluación no nos va a decir cuáles son los problemas, no va resolver nada, es como la radiografía, por sí sola no va a curar el hueso, pero por lo menos queremos hacer un plan con información verídica y veraz, que hoy no la hay".

A la vez, desterró la idea de que la escuela que tenga alumnos con bajos niveles de aprendizaje –de acuerdo con los resultados del operativo– será sancionada.