Con un decreto rubricado de su puño y letra el 19 de noviembre pero publicado el miércoles 16 de diciembre en el Boletín Oficial, el exgobernador Francisco Pérez entregó la concesión de las áreas petroleras La Paloma y Cerro del Alquitrán a Grecoil & Cía S.A, una compañía controlada por el empresario mendocino José Luis Manzano. Bajo el número 2030, el decreto autoriza a esa compañía a realizar trabajos de explotación y desarrollo de hidrocarburos por el término de 25 años. Greicol también está relacionada con Andes Energía, la compañía de petróleo y gas que Manzano comparte con su socio Daniel Vila.

A cambio de esta concesión, Grecoil tiene 30 días a partir de la publicación del decreto para aportar al denominado Fondo Escolar la suma de 164 mil dólares o su equivalente en pesos. Si no realiza este aporte, la autoridad de aplicación puede declarar la caducidad de la concesión. También debe invertir 8 millones 200 mil dólares en un programa de inversión y pagar, mensualmente, en concepto de regalías, el 12 % sobre el producido de los hidrocarburos líquidos "extraídos en boca de pozo valorizado sobre la base de los precios efectivamente obtenidos por éstos en las operaciones de comercialización de los hidrocarburos del área y sobre la producción de gas natural, conforme Artículos 62 y 63 de la Ley Nacional N° 17319 y 2 de la Ley Provincial N° 7526".

Dónde quedan 

La Paloma y Cerro del Alquitrán son emprendimientos que se encuentran en la cuenca Neuquina, una extensa área petrolera que abarca a la provincia de Neuquén, el sector occidental de La Pampa y Río Negro y la porción meridional de Mendoza, hasta los 34 grados de latitud sur.

Según datos de la Secretaría de Energía de la Nación, esta cuenca se encuentra en la actualidad moderadamente explorada, si se tiene en cuenta el número de pozos perforados en relación con la superficie total.

En ella se encuentran los desarrollos La Paloma, con reservas estimadas en 670 mil barriles, y Cerro del Alquitrán, que contendría otros 920 mil. Grecoil tiene el 100 % del control de la participación operativa en ambos bloques. La compañía es dueña, además, de Vega Grande, otro desarrollo ubicado en la misma zona, cuyas reservas están estimadas en 4,3 millones de barriles.