La Primera Cámara del Crimen confirmó la prisión preventiva para la monja Kosaka Kumiko y ordenó la detención domiciliaria, pero la medida no se hará efectiva inmediatamente. La Justicia deberá observar y garantizar que se cumplan todos los requisitos establecidos por la ley para este régimen de detención. Para la querella, lo importante es que Kumiko continuará en prisión.

La monja está imputada por facilitar los abusos en el Instituto Antonio Próvolo y deberá esperar el juicio detenida pero fuera de la cárcel, si es que se garantizan los requisitos para otorgarle el beneficio de la domiciliaria. Se evaluarán las condiciones del domicilio y se realizarán peritajes psicológicos a la religiosa y a la persona que esté a cargo.

Uno de los abogados querellantes, Juan Dantiacq, dialogó con Unidiversidad y explicó que para ellos "lo importante es que a Kumiko se le confirmó la prisión preventiva, más allá de dónde la cumpla". La efectivización domiciliaria tardará en cumplirse porque "la modalidad estará bajo parámetro del fiscal luego de los peritajes", señaló el abogado.

La defensa había apelado la prisión preventiva y había solicitado su nulidad. Sin embargo, la Justicia de Garantías no habían hecho lugar a estos pedidos, la jueza Alejandra Alonso confirmó la prórroga resuelta por el fiscal Gustavo Stroppiana y rechazó la posibilidad de la prisión domiciliaria. Ante esto, la solicitud de la domiciliaria llegó a la Primera Cámara del Crimen, integrada por los jueces Víctor Hugo Comeglio, Lilia María Vila y Ariel Spektor. 

Con respecto a la decisión de esta Cámara, Dantiacq sostuvo que, "mientras esto no entorpezca la causa y las declaraciones de las víctimas", no importa dónde cumpla la prisión Kumiko.

La religiosa está imputada por ser partícipe primaria en los presuntos abusos sexuales a niños del Instituto Próvolo de Luján y permanece presa en el penal de Agua de las Avispas desde el mes de mayo.

Por los 45 casos de abuso sexual hay un total de 15 imputados, de los cuales están detenidos los curas Horacio Corbacho y Nicola Corradi (en prisión domiciliaria); los exadministrativos José Luis Ojeda, Jorge Bordón y Armando Gómez; la monja Kosaka Kumiko y la exrepresentante legal Graciela Pascual. Mientras tanto, la monja Asunción Martínez y el exjardinero Apolinario Choque permanecen en libertad porque sus acusaciones son menores.

Caso Próvolo: imputaron a otros seis exempleados

Se trata de exdirectivos y personal de apoyo psicológico y de limpieza. Ya son 15 los acusados en la megacausa por abuso sexual a menores del instituto religioso de Luján.