Alberto Fernández adelantó este lunes que la cuarentena no terminará el próximo 13 de abril, sino que se va a “flexibilizar” por etapas permitiendo de manera progresiva el regreso al trabajo de determinados sectores. En este marco, el Gobierno decidió ampliar el listado de actividades exceptuadas del aislamiento social, preventivo y obligatorio.

“No vamos a terminar la cuarentena, lo que tenemos que ver es qué tipo de actividades vamos a flexibilizar”, expresó el mandatario ayer por la noche en diálogo con TN. En efecto, Fernández no quiere que el esfuerzo que viene haciendo el país desde el 20 de marzo sea en vano si, por liberar indiscriminadamente el aislamiento social, se produce un brote descontrolado del coronavirus. En ese sentido, explicó: "Lo peor que podría pasar es que, con esta idea de algunos de que hay que alimentar a la economía, terminemos enfermando a los argentinos”.

En este contexto, el Gobierno publicó este martes la Decisión Administrativa 468/2020 en el Boletín Oficial mediante la cual se amplió el listado de actividades productivas exceptuadas de la cuarentena total. De esta forma, se incorporó a la obra privada de infraestructura energética.

De aquí en más, los trabajadores y trabajadoras del sector podrán desplazarse para regresar a su labor. “Los empleadores y las empleadoras deberán garantizar las condiciones de higiene y seguridad establecidas por el Ministerio de Salud para preservar la salud”, se aclaró a raíz de la pandemia. Las personas alcanzadas por esa decisión administrativa deberá tramitar el Certificado Único Habilitante para Circulación Covid-19, que empezó a regir desde este lunes. “La realidad de la implementación del aislamiento social, preventivo y obligatorio ha demostrado la necesidad de incorporar entre las actividades y servicios esenciales referidos a la obra privada de infraestructura energética”, se justificó en los considerandos del documento, que lleva las firmas del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y del ministro de Salud, Ginés González García.

Alberto Fernández admite el impacto económico que provocó la cuarentena y que ese efecto se agravará cada día que se mantenga la estricta normativa; sin embargo, insiste en que es la clave para prevenir nuevos contagios y futuras muertes. “Tenemos que tratar de recuperar nuestras vidas poco a poco. La actividad económica tuvo un enorme costo por todo esto, eso es cierto, pero lo que hay que ver es qué queremos privilegiar: si que la economía empiece a moverse o que la gente no se infecte. Yo elijo cuidar a los argentinos y que no se enfermen”, dijo el Presidente, que además propuso a la Unión Industrial Argentina, a la CGT y la Cámara Argentina de Comercio trabajar en conjunto con los expertos que lo asesoran en materia de infectología.