Ante la cifra elevada de embarazos no deseados en adolescentes que hay en Argentina, más de 72 000 en 2017 según datos oficiales, Amnistía Internacional (AI) advirtió hoy sobre la "obligación" de despenalizar el aborto y eliminar la persecución legal que expone a las niñas y jóvenes a riesgos para su salud y su vida. 

"Los índices de embarazos no deseados que ponen en riesgo la vida de las niñas requieren que se elimine la amenaza penal como factor de disuasión para acceder a la interrupción voluntaria del embarazo de manera segura", dijo este jueves Paola García Rey, directora de Protección y Promoción de Derechos Humanos en Amnistía Internacional Argentina.

Y agregó: "La despenalización del aborto es un problema que atraviesa a todas las generaciones, pero tiene injerencia directa en las jóvenes y niñas".

Según datos del Ministerio de Educación de la Nación, el año pasado se registraron 72 791 embarazos adolescentes no deseados y, según las últimas estadísticas disponibles en el Ministerio de Salud, en 2013 hubo 8662 egresos hospitalarios por abortos en adolescentes en todo el país. "El embarazo a edad temprana trae aparejados riesgos a la salud de niñas y adolescentes, altas tasas de retraso y abandono escolar y dificultades en la inserción en el mercado de trabajo, lo que afecta negativamente sus vidas", agregó García Rey.

Además, la distribución de la maternidad adolescente en Argentina muestra una relación con el nivel de desarrollo social y económico de cada zona, con una incidencia mayor en las provincias del norte del país –Formosa, Chaco, Misiones, Salta–, "lo que refleja disparidades que a su vez son producto de la desigualdad en el acceso a servicios y la disponibilidad de recursos", advirtió Amnistía.

"Son mayormente las mujeres jóvenes y de bajos recursos quienes se ven obligadas a acudir a servicios inseguros para realizarse abortos, por lo que el impacto discriminatorio se ve potenciado en ese grupo", afirmó la especialista.

En este sentido y tomando en cuenta el debate que tiene lugar en el Congreso nacional durante las últimas semanas, Amnistía Internacional consideró que el Estado argentino tiene "la oportunidad de eliminar la persecución penal del aborto", lo que respondería a la recomendación del Comité de Derechos del Niño de las Naciones Unidas.

En 2016, el Comité instó a los estados a "despenalizar el aborto para que las niñas puedan, en condiciones seguras, abortar y ser atendidas tras hacerlo, así como a revisar su legislación para asegurar que se atienda el interés superior de las adolescentes embarazadas y se escuche y se respete siempre su opinión en las decisiones relacionadas con el aborto".