Según lo afirmó este miércoles el Ministerio de Seguridad de la Nación, un hombre acusado de contactar a una niña de La Matanza por la red social Facebook con fines sexuales fue detenido en Luján de Cuyo. La denuncia fue radicada en la UFI Especializada en Delitos Conexos a la Trata de Personas, Pornografía Infantil y Grooming del Departamento Judicial de ese partido bonaerense.

En la denuncia se señala que la niña fue contactada por un hombre mayor de edad, con quien mantuvo conversaciones por un largo tiempo en Facebook. Las interacciones, según la investigación, se trasladaron hacia el terreno sexual, ya que el detenido le envió varias fotografías y videos de niñas desnudas.

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A través de un comunicado, la cartera detalló que el detenido le refirió que vivía en la provincia de Mendoza, pero que tenía familiares cerca del domicilio de la niña, ofreciéndole ir a visitarla para después llevarla a vivir con él a Mendoza. Incluso, el hombre le explicó e indicó formas de escaparse de su casa. A raíz de esta situación, la autoridad judicial interviniente solicitó la colaboración de la Policía Federal Argentina para que llevara adelante la investigación que permitiera dar con la identidad del acosador sexual.

La División Delitos Cibernéticos Contra la Niñez y Adolescencia logró identificar al titular de las cuentas y de las líneas telefónicas utilizadas para el contacto.

Como parte del trabajo, además, y con la colaboración de la División Unidad Operativa de la policía mendocina, se determinó el domicilio del hombre, por lo que se allanó su vivienda en Luján de Cuyo por orden de la Fiscalía.

En el lugar, se secuestraron tres teléfonos celulares. El hombre quedó detenido en una comisaría de la provincia hasta ser trasladado hacia Buenos Aires, donde quedará a disposición del Juzgado de Garantías N.º 4 de La Matanza, a cargo de Mary Mabel Castillo.

¿Qué es el grooming?

El grooming se puede dar a través de cualquier medio digital que permita la  interacción entre dos o más personas, como redes sociales, correo electrónico, mensajes de texto, sitios de chats o páginas de juegos en línea, entre otros.

Cuando el grooming se limita al entorno digital, como envío de fotos íntimas o grabación de contenidos de la cámara web, el menor podría sufrir traumas psicológicos como víctima de la manipulación y las consecuencias sobre la privacidad en caso que dichos contenidos sean publicados. En caso de que se concrete un encuentro cara a cara, las consecuencias podrían ser ya de carácter físico, pudiendo llegar incluso al abuso sexual.